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Sinónimo de neutralidad, puntualidad y dinero, Suiza es uno de los países más ricos y desarrollados del mundo. Cuenta además con una gran comunidad de inmigrantes procedentes de varios continentes, lo que la convierte en uno de los países europeos con mayor diversidad cultural. Ideal tanto para los amantes de la naturaleza como para los más urbanitas, en Suiza te sentirás como en casa.
Si te gusta caminar y disfrutar del aire puro tienes donde elegir: los Alpes suizos o los hermosos lagos y valles que abundan en el país te esperan. Si prefieres visitar los mejores museos o degustar los mejores quesos y chocolates, no te pierdas ciudades como Ginebra o Zurich.
En la primera se encuentra el lago más grande de Europa occidental (el Lemán) así como el Palacio de Naciones Unidas, el centro de Naciones Unidas más grande del mundo, después del de Nueva York. Entre la impresionante oferta museística de la ciudad destaca el Museo Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, que mediante una sofisticada combinación de recursos audiovisuales, esculturas y ordenadores documenta la historia de la fundación de la Cruz Roja por Henry Dunant, así como su función humanitaria. En Zurich, aparte de imponentes monumentos religiosos románicos y barrocos -uno de los cuales cuenta con el reloj más grande de Europa- encontrarás el monte Uetliberg. Situado a 869 metros sobre el nivel del mar, es el punto más alto de la ciudad y desde su mirador se obtienen impresionantes vistas de Zurich, su lago y los Alpes. Un auténtico lujo.
Los vuelos a Suiza con Iberia duran apenas dos horas y media. Un tiempo que te situará en el corazón de Europa. Suiza cuenta con un clima caluroso durante el verano, concretamente entre los meses de julio y agosto, aunque nunca llega a ser extremo. La temperatura puede oscilar entre los 18 y los 28 grados centígrados en la mayoría de cantones, aunque en los que se encuentran a mayor altitud las lluvias en estos meses serán más frecuentes.
Por otro lado, en invierno el clima no es muy agradable para los amantes del sol, ya que llega el frío, las heladas, la nieve y los días grises. Entre los meses de diciembre y marzo las temperaturas oscilan entre los 2 y los 7 grados centígrados, en ocasiones bajando a menos cero. Aun así, con el calentamiento global, parece que cada año el clima suizo se va templando más y más.
En primavera y otoño las temperaturas están entre los 8 y los 15 grados, aunque puede haber días de más calor y días de más frío. En otoño, sobre todo, abunda el gris y las lluvias, por lo que es imprescindible hacer uso del paraguas. En primavera, en cambio, todo el país se llena de color y esto le aporta un poco más de vida al paisaje. Aun así, cualquier época del año es bonita para visitar el país, sólo depende de la estación que nosotros mismos prefiramos.
Si tomas un vuelo de Iberia para descubrir este destino llegarás a los aeropuertos de Zúrich y Ginebra.
El Aeropuerto Internacional de Ginebra es un aeropuerto que se encuentra ubicado en Ginebra, a 5 km del centro de la ciudad. Cuenta con conexiones directas a las autopistas, autobuses hacia Ginebra y a la estación de la empresa ferroviaria nacional.
Por su parte el aeródromo de Zúrich también llamado Aeropuerto de Kloten, está situado en Kloten, en el cantón de Zúrich y es el aeropuerto más grande y con mayor volumen de pasajeros de toda Suiza.
Asimismo, si vuelas a Suiza podrás degustar sus quesos típicos cmo como el emmental, el gruyer, el vacherin y el appenzeller, todos ellos formando parte primordial de las famosas raclette y de las fondues.