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Guía turística: qué hacer y ver en Roma
La ciudad histórica y cultural por excelencia.
Todos los caminos conducen a Roma. ¡Es cierto! Disfruta de sus históricos e impresionantes monumentos y adéntrate en una cultura que no te dejará indiferente. Como dice el dicho italiano “Per conoscere Roma non basta una vita”, efectivamente, necesitarás más de una vida para conocerla y cada viaje a la ciudad será diferente. ¡No te pierdas esta experiencia llena de historia, cultura, gastronomía y ocio que te enamorará!
Así lo ven otros viajeros
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Orvieto
Un atractivo pueblo ubicado sobre una roca de origen volcánico y que tiene la catedral más importante del gótico italiano
El pueblo sobre la roca
¿Habías visto alguna vez un pueblo que se levantase 50 metros por encima del nivel suelo? Orvieto lo hace. Por ello, es uno de los lugares más singulares de Italia. Se trata de una aldea de origen prehistórico asentada sobre un enorme acantilado de piedra. Además, todos los alrededores son una llanura verde y enorme. Esto hace que sea aún más impresionante la visión de este pueblecillo. Es uno de los asentamientos más antiguos de toda Italia. No se sabe con exactitud a cuándo se remonta el primer asentamiento pero sin duda es muy anterior a la época de la Roma Imperial, de hecho, se cree que podría remontarse a la Edad del Bronce. Todo su casco antiguo es digno de ser recorrido pero su catedral es una de las paradas obligada: del siglo XIV, está considerada como una de las obras maestras del gótico italiano. Sus vinos y licores también tienen una reconocida reputación y puedes probarlos en cualquiera de los mesones y cantinas que están repartidos por la aldea.
Lago di Bracciano
Si dispones de días, no dejes de visitar este impresionante lago volcánico y los pueblos de su alrededor
Oasis de agua rodeado por pueblos medievales
El Lago di Bracciano es un lago paradisíaco, regalo de un volcán. Situado a 32 kilómetros de Roma, estas marismas de origen volcánico nacieron del movimiento de las placas tectónicas subterráneas. Pero no te asustes, es un oasis de paz y tranquilidad, un enorme charco de agua limpia y cristalina rodeado de preciosos pueblos medievales. Desde sus aguas se divisa Bracciano, como si estuviera vigilando el lago y detrás, Trevignano y Anguillara. Estos pueblos fueron construidos en la época romana pero a lo largo de sus calles encontrarás numerosos edificios y fortificaciones medievales ya que eran villas muy utilizadas en las contiendas debido a su ubicación. Al tratarse de lugares muy escondidos y altos, los ejércitos podían ver llegar al enemigo. De hecho, Bracciano tiene el peculiar y espectacular castillo de Orsini-Odescalchi que se cree que data del siglo X aunque pudiera ser anterior. Una curiosidad para los amantes del cine: en él se casaron los famosos actores Tom Cruise y Katie Holmes. Todos estos pueblos están llenos de jardines y calles empedradas y rodeados por un vasto bosque que rodea el lago. Es uno de los secretos mejor guardados de Roma y, en los días de verano, un remanso de paz y naturaleza.
Ver la costa desde Borghetto dei Pescatori
Pasea por sus pequeñas calles y descubre como viven los marineros en este pintoresco pueblo
Pequeño y colorista pueblo marinero en la costa de Roma
El Burgo de los Pescadores (esa es la traducción aproximada) es uno de los rincones mágicos de Italia situado a pocos kilómetros de Roma, en los alrededores de Ostia. Aparece en el litoral de estos grandes arenales y se levanta como un entramado de bonitas casas de una sola planta y de colores. Fueron los pescadores los que, en el siglo XIX, levantaron estas viviendas para poder estar cerca del mar y poder salir a faenar cada mañana. Este pueblecito apenas ha cambiado y al atravesar sus pocas pero encantadoras calles parece que el tiempo se ha detenido. En el centro, la iglesia de San Nicola di Bari, patrono de los pescadores, cuida de su vecindario. Puedes pasear hasta la playa, a pocos metros y sentarte en las rocas que defienden al pueblo en los días de tormenta del fuerte oleaje. Apenas ha cambiado a lo largo de los años. De hecho, aún puedes ver las embarcaciones que cada día se echan al mar. Por detrás del pueblo, un sinfín de paseos entre los bosque te esperan para ver caer el sol.
Puerto de Ostia
Un paseo por este lugar te dará una idea de la fuerza del comercio en la antigua Roma
La antigua puerta de entrada a Roma
Este emblemático puerto es un buen escondite para los días de calor en Roma. A pesar de estar situado a 35 kilómetros de la ciudad y de que puedes ir en metro, no es un lugar especialmente turístico en cuanto a playas se refiere. Sus arenales no son tan espectaculares como otras zonas de Italia, pero cuenta con varios kilómetros de playa. El puerto, restaurado en el XIX, es un bonito entramado de barcos, paseos y Mar Mediterráneo y en sus muelles están guardados los recuerdos del esplendor del Imperio. Durante la época de los emperadores Julio y Claudio, el Imperio se extendía hasta donde el sol se pusiese y todas las embarcaciones con sus mercancías terminaban en este puerto que era una puerta más de la ciudad. Los barcos atracaban en el embarcadero y empezaba la ruta comercial que acababa en el Foro Romano. Ostia se convirtió en una ciudad muy poblada, sin embargo, ahora caminarás por ella como si se tratase de un lugar mágico pero olvidado.
Paseo hasta la Plaza del Quirinale
Contempla sus monumentos y ,si te coincide el horario, un curioso cambio de guardia
¿Quieres conocer dónde vive el presidente de la República?
Uno de los placeres que ofrece Roma es el paseo hasta esta Plaza de Quirinale, reducto de la Antigua Roma Imperial y plaza donde se encuentra la actual residencia de todos los presidentes de la República. Como es habitual, los grandes monumentos coronan los montes que vigilan la ciudad. Quizá con la intención de que ellos también vigilasen la posible incursión de tropas extranjeras. Sea como fuere, la plaza del Quirinale guarda en su interior un gran número de monumentos. Entre ellos: el grupo escultórico que forman Castor y Polux (ancestrales hermanos guardianes de la ciudad) y el obelisco situado junto a ellos, traídos del mausoleo de Augusto y de las Termas de Constantino, ambos de la época Imperial. Al frente, el palacio de Quirinale, enorme construcción de finales de la Edad Media como residencia para el papa y que desde la unificación de Italia es la residencia del gobierno. Frente a la entrada al edificio, cada día a las 15:00 horas tiene lugar el cambio guardia. Si bien no es tan popular como otros, es magnífico escuchar la banda de música que acompaña a los militares durante el paso.
El fútbol en Roma
Roma y fútbol siempre han ido unidos, ¿con qué equipo vas tú?
Disfruta de un partido de alto nivel
Para los amantes del deporte, el fútbol en Italia es uno de los grandes atractivos. Acudir a un partido puede ser un buen plan. Roma cuenta con dos equipos de primer nivel: el AS Roma y el Lazio. Son rivales, pero comparten campo, el Estadio Olímpico de Roma, cosa que que garantiza partidos todos los fines de semana. Además de competiciones europeas, entre semana,se suelen organizar partidos amistosos entre clubes. Por ello, no es difícil conseguir un par de tickets para disfrutar de un encuentro. Como recomendación, te advertimos que las entradas pueden ser compradas en el mismo estadio pero no hay venta al público el mismo día del partido, de modo, que deberás reservarlas con mayor antelación o por Internet. ¡Disfruta del partido!
La fiesta de Noantri
Fiesta de origen religioso que ni italianos ni turistas quieren perderse por su animado ambiente
Aprovecha tu viaje para disfrutar de unas fiestas tradicionales
Si tu estancia en Roma cae sobre el 16 de julio, en el barrio del Trastevere se celebra la festividad de Noantri. Estas fiestas duran dos semanas y es una de las celebraciones más populares y con mayor tradición de la ciudad. Es curioso que, a pesar de ser una fiesta religiosa, en honor a la Virgen del Carmen, pocas personas lo celebran con este sentido, incluso muchos jóvenes desconocen su origen. Todo el barrio se llena de luces para acompañar una procesión que expondrá a la Virgen de la Iglesia de Santa Ágata durante una semana. Puedes ir a visitarla a la plaza del Sonnino. Durante el día hay música en directo por todas las calles, mercadillos y muchas actividades culturales y callejeras. Por la noche, los bares “improvisados” en las calles se llenan de gente hasta altas horas de la madrugada con un ambiente que mezcla todo tipo de público. Gente joven ajena a la celebración de la Virgen del Carmen, romanos fieles y devotos, turistas curiosos y vecinos del lugar.
San Lorenzo y los universitarios
Ademas de por tener una larga historia detrás, esta zona es conocida por ser el barrio universitario
¿Sabes por qué se le llamó Barrio Rojo?
Construido a finales del XIX, albergaba a los trabajadores extranjeros que venían a levantar Roma. La ciudad había padecido una profunda crisis en la década anterior y ahora, experimentaba un crecimiento muy fuerte. A lo largo de la historia, diferentes acontecimientos históricos, como haber sido el único barrio que se opusiese a la dictadura fascista, le ha hecho ganarse la reputación de barrio rojo. Sea o no lo sea, es un barrio menos turístico y muy romano. En su interior se encuentra la Basílica de San Lorenzo Extramuros, una de las cinco iglesias más importantes de Roma. Desde allí puedes seguir a pie los muros que marcaban los antiguos límites de la ciudad hasta la popular Porta Tiburtina. Por la noche, este barrio cambia completamente y pasa a llamarse el barrio de los universitarios: las calles se inundan de estudiantes que llenan los bares y plazas de la zona hasta muy entrada la madrugada.
Zona Testaccio
Barrio autóctono y poco turístico en el que pasar un día diferente o, si lo prefieres, una buena velada
Conoce la vida cotidiana de los romanos actuales
Como si fuera la continuación del Trastevere aparece el barrio de Testaccio, muy cerca del Puente de Porta Portese a orillas del Tíber. Como su nombre indica se ubica a las faldas del monte Testaccio. Este barrio nació como punto al que llegaban las mercancías de la Roma Imperial. El puerto de Ostia era la entrada al Imperio y la entrada a la ciudad. Por ello y como curiosidad, este monte llegó a albergar 26 millones de ánforas rotas pues los romanos las almacenaban allí pensando que podrían reutilizarlas. Todas estas calles son estupendas para conocer el día a día romano, en cada esquina encontrarás vecinos haciendo la compra y pizza para llevar, repartidores en Vespa, mercadillos y multitud de restaurantes y terrazas de comida casera italiana (por cierto, muy recomendables). También posee una larga tradición futbolera pues albergaba el histórico campo de fútbol de Roma y pese a que ya no se disputen allí los partidos es habitual encontrar grupos de hinchas y celebraciones del equipo local. Por la noche es uno de los barrios con más vida nocturna de toda la ciudad. De hecho, ha mantenido mucho la identidad y es muy poco turístico, de modo, que si quieres conocer la vida nocturna autóctona, este barrio te brinda una buena oportunidad.
Campo dei Fiori
Por las mañanas, un mercado típico, y por las noches, punto de reunìón nocturna para turistas e italianos
El otro centro de Roma conocido por su ocio nocturno
En Roma existe otro centro de la ciudad, menos monumental y más aldeano pero igualmente representativo para la urbe. Se trata del Campo dei Fiori. Esta plaza, que da nombre al barrio, se encuentra entre la gran avenida de Vittorio Emanuele II y el río Tíber. Por aquí, transcurre la vida de barrio de Roma. Y lleva siendo así desde hace muchos siglos. Antes de la construcción, ya se agolpaban en esta zona los vecinos para mercadear con productos de artesanía, agricultura y ganadería del lugar. Por ello, el papa Calixto III mandó levantar una plazoleta para ubicar dicho mercado en un antiguo campo de flores, de ahí le viene el nombre. Corría el año 1456 y desde entonces se mantiene este mercado. Actualmente puedes visitarlo todas las mañanas de lunes a viernes. Posiblemente sea el mercado más auténtico de toda Roma, al menos, se dice que si quieres conocer la verdadera Roma, debes visitar este Campo dei Fiori. Toda este barrio se convirtió en la zona acomodada de la ciudad a partir de la Edad Media por lo que si sigues caminando a través de sus calles, encontrarás elegantes construcciones de la aristocracia como el Palacio Farnese y el Palacio Spada.
135 escalones de Plaza de España
Si la Plaza de España ya impresiona, el día del Donne Sotto le Stelle se crea un ambiente que no deberías perderte.
Glamour en esencia
Los 135 escalones de la Piazza Spagna se llenan de glamour durante el mes de julio. Durante este mes, toda la plaza se pone sus mejores galas para recibir el internacionalmente conocido desfile de Donne Sotto le Stelle (mujeres bajo las estrellas). Este desfile se organiza julio tras julio y trae consigo a los mejores diseñadores y modistos, las modelos más cotizadas y las principales firmas del mundo de la moda. A diferencia de otros desfiles, este evento está abierto al público (aunque obviamente las zonas inmediatamente limítrofes a la pasarela están reservadas). Esto hace que si ya de por sí la ciudad tiene mucho interés por la moda, en estos actos toda Roma esté volcada en su preparación. Si quieres visitarlo, te recomendamos que hagas tiempo en las terrazas circundantes a la escalinata y esperes a escoger tu sitio para contemplar el desfile. Independientemente de tu interés por la moda, solamente el ambiente que se genera por las noches y la decoración con la que visten la plaza durante esos días, hacen de este lugar un precioso acto que contemplar bajo la noche romana estival.
Mercado de Via Sannio, centrado en la ropa.
Busca y encontrarás curiosos objetos a buen precio
Piérdete en este mercado callejero
En Roma la cultura y la costumbre de los mercados callejeros es una práctica tremendamente extendida. Hay multitud de mercados a lo largo de toda la ciudad, de todo tipo y en todos los horarios. Por ello es bueno poder seleccionar. En estos mercados puedes encontrar grandes oportunidades y, sobre todo, cosas únicas. El mercado de Sannio es uno de esos lugares no excesivamente transitados donde puedes encontrar muchas gangas mientras paseas entre los puestos. Está situado en la Via Sannio bajo las murallas aurelianas. Aunque no es muy céntrico tienes varios autobuses a tu disposición (118, 87, 16, 81, 13 y 15). Este mercado lleva en funcionamiento desde el fin de la Segunda Guerra Mundial. Aunque en sus comienzos se trataba fundamentalmente de un mercado de ropa, en la actualidad puedes encontrar todo tipo de complementos, artículos para el hogar e, incluso, puestos que nada tienen que ver con el mundo de la moda como libros y discos. El ambiente es muy tranquilo y aunque es bastante conocido, puedes pasear entre sus calles sin tumultos y sin agobios. Los vendedores suelen ser tipos amables y pacientes de modo que no tengas reparo en trasladarles tus dudas.
Juguetería Bartolucci
Siéntete como un niño y revive el cuento de Pinocho
El adorable personaje que cobra vida en Roma
Si te acompañan niños, quieres comprar algún regalo o simplemente te gustan los cuentos y juguetes, en la Via Lungofoglia, cerca de la comercial calle Via del Corso, encontrarás un lugar para ti. En esta calle hay unas cuantas jugueterías que venden verdaderas obras de arte para los peques. Pero entre todas ellas destaca la juguetería Bartolucci. Aquí, cual Geppetto en el cuento de Pincho, sus dueños fabrican de manera artesanal y con madera todos los juguetes de la tienda. Merece la pena que entres solamente a ver los originales muñecos. La tienda es muy popular y por ello, los precios nos son baratos aunque es muy probable que te acabes llevando alguno de recuerdo.
Porta Portese. El mercado de los domingos en el trastevere.
Un mercadillo en el Trastevere que nada tiene que envidiar al mismísimo Portobello de Londres
Mercado multicultural en el barrio más encantador
Los domingos, desde primera hora de la mañana, un enorme y variopinto mercadillo invade el barrio del Trastevere. Se trata del mercado Porta Portese: uno de los más populares rastrillos de Roma tanto por los años que lleva como por la extensión que tiene. Más de 4.000 puestos ambulantes, conciertos en la calle, decoración de colorines y un alegre gentío hacen de este mercado una experiencia inolvidable y puramente romana. Entre sus puestos encontrarás desde antigüedades y colecciones de discos en vinilo hasta ropa y calzado, pasando por alimentación típica de Roma e incienso y velas. Aquí todo es posible. Lo variopinto de los puestos, la multiculturalidad de los tenderetes y lo animado del ambiente, con conciertos y música casi en cada calle lo convierten en el mercadillo más popular de la ciudad. Por cierto, te recomendamos que comiences a recorrerlo desde Porta Portese, la puerta más nueva de la ciudad que le da nombre al mercado. Te será más fácil bajar por las callejuelas de este barrio. Una única advertencia: cuida tus pertenencias, aunque el ambiente es muy agradable, no se debe estar distraído.
La Vespa
Recorre la ciudad con una Vespa y llévate otro punto de vista de Roma
El auténtico símbolo italiano
¿Sabes por qué se le puso el nombre de Vespa a esta moto? Cuenta la leyenda popular que cuando se presentó el prototipo de moto a Piaggio, el dueño de la marca exclamó: ¡pero si parece una avispa! Y a partir de ahí se bautizó con ese nombre a esta motocicleta. Ahora, la archiconocida Vespa italiana es uno de los iconos más identificativos de Italia. Este modelo se popularizó en los años 50 ya que su marca, Piaggio, acertó construyendo una moto para el pueblo. Con el paso del tiempo esta moto se ha ido convirtiendo en uno de los símbolos de Roma y de Italia. Y, aunque no te puedas comprar una, si que encontrarás todo tipo de recuerdos con su imagen. Además, el alquiler de una Vespa para conocer la ciudad de Roma se ha popularizado en los últimos años y puede ser económico y divertido. Tienes cantidad de puntos de alquiler. En concreto, en la propia estación de Termini, recién bajado del tren, tienes información y un puesto de alquiler. ¿Qué hay más divertido y cómodo que recorrer la ciudad de Roma a bordo de una Vespa?
Vía Margutta y la artesanía
Aunque no quieras comprar artesanía, merece la pena conocer este lugar mágico en Roma
Curiosa calle repleta de arte
Esta curiosa y recogida avenida es conocida por ser la calle de los artistas y de los artesanos. Se la conoce como una de las calles de tiendas pero posee un ambiente propio y diferente al resto. A lo largo de la calle se mezclan a uno y otro lado las galerías de arte con los talleres de artesanos, las tiendas de muebles y antigüedades de ocasión con talleres de costura de firmas locales, tiendas de discos de segunda mano y cafeterías. Esta calle ha sido una de las más cotizadas y famosas de Roma debido a su aparición en numerosas películas. Entre ellas destaca Vacanze Romane del director William Wyler quien le dio por primera vez un papel protagonista a Audrey Hepburn junto a Gregory Peck. Las escenas de la pareja en esta película han quedado en la memoria de Roma. Además, también fue residencia habitual de artistas, desde Federico Fellini hasta Stravinsky, Picasso o Puccini. Curiosamente su nombre hace alusión a un río sucio que hacía las veces de alcantarillado de la ciudad. Tras su transformación ahora está lleno de árboles y viñedos siendo uno de los rincones mágicos de la ciudad eterna.
Via del Corso
Desde moda italiana a pequeñas tiendas artesanales, todo tiene cabida en esta pintoresca calle
Bienvenidos a la calle principal de Roma
La Via del Corso es la espina dorsal de Roma, es una calle que transcurre desde la Piazza Spagna hasta Piazza Venezia. También es el cordón umbilical de la zona de tiendas en Roma. Aquí encontrarás en la misma calle una curiosa combinación de pequeñas tiendas artesanales con los establecimientos de las marcas de mayor lujo del mundo. Hay sitio para todos. A partir de esta calle, nacen Via Condotti, Via Frattina y Via Bocca: sinónimo del lujo y de la exclusividad. Marcas como Gucci, Prada o Louis Vuitton están desperdigadas a ambos lados de la calle. Se dice que todo comenzó con la inauguración de la primera tienda de Bvlgari en 1905. Esto atrajo a las clases más acomodadas de la ciudad a comprar por esta zona y el resto de tiendas continuaron la tendencia convirtiendo este triángulo de calles en la zona más exclusiva de la moda de Roma.
Outlet de Castel Romano
Ropa, zapatos, complementos, gastronomía… aquí lo encontrarás todo a muy buen precio!
Gran centro comercial con precios rebajados
En las afueras de Roma, situado a 13 kilómetros de la ciudad, en la Via Ponte di Piscina Cupa, 64, se encuentra el outlet del enorme centro comercial Castel Romano. Esta muy bien comunicado y puedes llegar a él en tren y autobús en pocos minutos. Sin duda, este es uno de los outlets más visitados por los romanos. Una de los secretos de su éxito es que varias de las principales marcas de ropa, especialmente de calzado italiano (que posiblemente sean las más afamadas del mundo) se han instalado en este enorme centro comercial y ofrecen grandes descuentos sobre sus productos. No solamente ropa y complementos, también grandes marcas de alimentación, cosméticos y cosas para el hogar tienen un hueco en este espacio.
Discount dell’alta moda
Para los amantes del lujo, este escondido local será su paraíso particular
Alta costura a precios asequibles
Te contamos uno de los secretos que puedes encontrar en las calles de Roma. En concreto en la Via di Gesú e Maria número 16, a unas cuantas calles de distancia de la Piazza Spagna. En este lugar abre sus puertas una tienda que mantiene un inaudito equilibrio entre marcas y precios. La tienda, llamada Discount dell´alta moda, es una especie de híbrido entre un outlet y una boutique. Aquí encontrarás piezas y colecciones de las mejores y primeras marcas pero con unos enormes y muy sugerentes descuentos. Además de ropa de mujer y hombre suele sacar a la venta complementos y calzado. Si bien es cierto que el establecimiento está bastante escondido, bien merece la pena que lo apuntes en tu ruta de tiendas. Otra tienda con grandes descuentos sobre marcas muy reconocidas es un establecimiento ubicado en el número 88 de la Via del Corso, se llama Saldi di Fine Collezioni.
Bvlgari Outlet
Si te gustan los artículos de Bulgari, este, sin duda, es tu lugar
Artículos Bulgari a precios increíbles
Italia es sinónimo de moda. Las marcas de ropa y complementos más cotizadas del mundo proceden, en gran parte, del país italiano. Roma es uno de los epicentros de la moda en el mundo. Debido a la gran demanda, la gran cantidad de marcas y la necesidad de estar en la vanguardia de las tiendas, Roma, posee varias zonas en las que encontrarás ofertas y productos que no son fáciles de encontrar. Este es el caso del outlet de Bvlgari. Esta marca italiana de joyas y de productos de lujo, ha abierto este establecimiento en la Via Aurelia, 1052. Y ha supuesto un impacto mediático tremendo en la ciudad. Se ha convertido en uno de los destinos más solicitados en las rutas de shopping de la ciudad ya que se encuentran grandes ofertas. Desde colecciones de ropa y complementos para hombre y mujer hasta objetos de joyería más selectos, se presentan con grandes descuentos.
Parque Natural Regional Dell´Appia Antica
Lugar perfecto para pasear y seguir descubriendo la grandiosidad de Roma
El pulmón de Roma
La Via Appia es el comienzo del Imperio Romano. Fue la primera calzada construida con la intención de conectar la capital del Imperio, Roma, con otras ciudades conquistadas. En este caso, Capua y Brindisi, punto fundamental para las rutas comerciales. Esta antigua autopista romana esconde mucha más historia de lo que parece. Fue construida en el siglo IV a.C. por el cónsul Appio Claudio (de ahí el origen de su nombre). Con la llegada del cristianismo como religión oficial al Imperio en la época de Constantino, las nuevas leyes prohibieron los enterramientos en el interior de la ciudad. Por este motivo, se comenzaron a levantar un gran número de mausoleos a la orilla de esta calzada. Todos estos edificios fúnebres han llegado a nuestros días y nos ha traído consigo una gran cantidad de ruinas y testimonios romanos que puedes visitar en este parque. Su gran extensión (casi 18 kilómetros) y la frondosa vegetación en la que está envuelta lo convierten en la segunda zona verde más grande de Europa con casi 40.000 hectáreas. Por cierto, cada domingo se libera la ruta del tráfico y se reserva para el uso exclusivo de los peatones, por ello te recomendamos que lo recorras en este día.
Villa Adriana
Edificaciones del siglo II que, gracias a su conservación, podrás hacerte una idea de cómo eran en realidad
Restos arqueológicos a las afueras de Roma
¿Preparado para un viaje en el tiempo? La Villa Adriana es una campo de más de 120 hectáreas a las afueras de Tívoli. En su interior, cientos de edificios y construcciones levantadas en el siglo II. El hecho de estar tan aislado y de estar tan bien conservado hace que puedas imaginar el aspecto de esta zona en la época de su construcción. Lo cierto es que fue el aburrimiento del emperador Adriano lo que propició este parque. Este emperador, hastiado de su enorme palacio mandó construir este enorme parque y en él, reconstrucciones de sus edificios favoritos de los imperios egipcios, griegos y otros que llamaron su atención. La finalidad fue simplemente, la de recrearse paseando entre estas réplicas. Quizá no fuera la construcción más funcional del imperio pero nos ha dejado uno de los más bellos testimonios del Imperio. Al pasear entre las calles que forman las edificaciones destacan el Teatro Marítimo rodeado por un enorme y precioso estanque, lugar idóneo para descansar un rato, contemplando el conjunto de columnas romanas que lo defienden. Después puedes visitar el Canopo y el templo de Serapis, basados en las construcciones de la antigua Alejandría, ciudad muy influyente en la historia de Roma.
Piazza de Campidoglio
Aquí comprenderás la expresión "Todos los caminos conducen a Roma"
El kilómetro cero de Roma
La Piazza del Campidoglio o Plaza del Capitolio es el equivalente al kilómetro cero de la ciudad de Roma. A partir de este punto, partían todas las vías que comunicaban el Imperio y por este punto se acuñó aquello de todos los caminos llevan a Roma pues todas las calzadas romanas terminaban en esta plaza. Presidiendo este gran óvalo se levantaba el templo a Júpiter en donde las tropas romanas se arrodillaban antes y después de los combates para rendirle homenaje. Se cuenta que el origen de la actual plaza parte del papa Pablo III Farnese, el cual, al comenzar su papado manifestó su vergüenza por el aspecto que presentaba la plaza y encargó a Miguel Ángel su restauración. De este modo, en 1536 comenzó la obra del genial pintor que levantó los tres edificios que hoy en día siguen cuidando de la plaza. De una manera muy significativa, orientó la plaza hacia la Basílica de San Pedro Vaticano, levantó el Palacio Nuevo y restauró el Palacio de los Conservadores, actualmente utilizados como los Museos Capitolinos. En el medio de la plaza, la estatua de Marco Aurelio vigila lo que sucede y nos recuerda la historia de Roma.
Via Appia
Impresionante vía de comunicación de la Roma Antigua con más de 2000 años de vida
”La vía Apia es conocida comúnmente como la reina de las grandes calzadas romanas”
La primera autopista del mundo es la Via Appia y tiene más de 2.000 años. Se construyó en el año 312 antes de Cristo. Esta calzada es una de las claves del Imperio Romano. Habrás oído muchas veces la expresión todos los caminos llevan a Roma, pues bien, estas gigantescas construcciones romanas lo hacían posible. En un tiempo en el que los medios de construcción eran totalmente primitivos, el Imperio Romano consiguió levantar un entramado de calzadas cuya columna vertebral era esta Via Appia que unían y comunicaban todo su vasto imperio. Unía la ciudad de Roma con la de Brindisi en la que se encontraba el puerto que lo unía con Grecia, vía comercial muy importante para el Imperio. Esta carretera guarda un sinfín de episodios históricos y leyendas míticas para la ciudad. Se dice que aquí llegaron San Pablo y San Pedro a Roma y que los primeros cristianos salieron a recibirles. Lo que si es seguro es que a orillas de la carretera se han descubierto un gran número de tumbas romanas ya que las leyes de la ciudad no permitían los enterramientos dentro. Ahora, todo el parque de la Via Appia Antica es uno de los grandes parques de Roma por los que pasear.
Villa Borghese
Es el lugar perfecto para desconectar de la ciudad y pasear
Naturaleza en plena ciudad
La Villa Borghese es un rincón a las afueras de Roma para esconderte y descansar del ajetreo de la ciudad. Es una de las zonas verdes más grandes de Europa y, desde luego, la más apetecible en Roma. Este gigantesco parque es diferente a otros, quizá no es tan famoso y por ello, gobierna la tranquilidad. No se trata de un lugar lleno de monumentos, hay una especial armonía entre la naturaleza y el arte que lo decora. Está presidida por un palacio. En realidad, esta construcción se remonta al siglo XVII y mantiene el recuerdo del Cardenal Borghese, una de las figuras clave para el arte en Roma durante el siglo XVI y XVII. Este cardenal se adueñó de todos los terrenos limítrofes y creó este enorme parque. Además, fue mecenas de gran parte de los artistas de la época. Por ello, en el siglo XIX cuando su familia hubo de deshacerse de estas propiedades, el gobierno de Roma estableció allí la Galería de Arte Borghese con obras de Tiziano, Bernini, etc. Dentro de este parque hay otros atractivos que visitar como el zoo de Roma o el Silvano Toti Globe Theatre, una curiosa reproducción del teatro de Shakespeare.
Plaza Venecia
Seguramente pasees por ella más de una vez y de cada vez descubrirás un detalle nuevo
Centro neurálgico de la ciudad
A un lado, el gigantesco Monumento a Vittorio Emanuele II, al otro, el Palacio de Venecia y en medio, un continuo tráfico de paseantes, turistas y trabajadores. Estás en la Plaza de Venecia, uno de los epicentros de la actividad y del turismo de la ciudad de Roma. Como decíamos, esta plaza está presidida por el polémico y enorme Monumento al rey Victor Manuel II quien consiguió la unificación italiana bajo su reinado. Este descomunal edificio despierta las miradas de los turistas pero también la polémica entre los romanos. Tanto sus desmesuradas proporciones como la exageración patriótica de su iconografía y el blanco de la piedra que choca con el resto de los monumentos de Roma han provocado el rechazo de gran parte de la población. Se ha ganado los apodos de máquina de escribir y tarta de bodas. En contraposición, al otro lado de la enorme escalinata, se levanta el Palacio de Venecia. El primer palacio renacentista de Roma. Fue la residencia papal durante muchos años. Pero tiene especial fama por haber sido la residencia de Mussolini, de hecho, el dictador usaba uno de los balcones para sus interminables discursos. Y esta es una imagen que ha quedado grabada en la memoria de Italia.
Piazza Navona
La plaza más bella de Roma y una de las más concurridas
La plaza de las fuentes
Dicen que si la Fontana de Trevi es la fuente más bonita del mundo, la plaza Navona es la más plaza más bonita de Roma. Esta enorme elipse ocupa el lugar que en el año 86 ocupaba el Circus Agonallis donde se celebraban numerosos torneos deportivos. En el siglo XVII, el papa Inocencio X ordenó la transformación de estas instalaciones a la actual plaza. Fue un proyecto que llevaron a cabo los dos arquitectos más afamados de la época: Bernini y Borromini (que curiosamente estaban enemistados entre sí). En su interior hay importantes edificios como el Palacio Braschi y el Palacio Pamphill así como la iglesia de Santa Inés de Agone. Pero sin embargo, los principales atractivos de esta plaza son las tres enormes fuentes que dividen los tres tramos de esta elipse peatonal. La Fontana dei Quattro Fiumi, construida por Bernini en 1651 es, quizá, la más espectacular de todas. Sus cuatro estatuas representan los cuatro ríos más importantes del mundo: el Nilo, el Danubio, el Río de la Plata y el Ganges. Y coronando la fuente un obelisco de 16 metros de altura de la época imperial. Las otras dos fuentes son la Fontana del Moro y la Fontana de Nettuno.
El Palatino
Visita la cuna de Roma y conoce la leyenda de Rómulo y Remo
Y aquí comenzó todo…
Este montículo se levanta como si quisiera vigilar la ciudad de Roma. En realidad es el origen de la urbe. La trágica leyenda cuenta que en este monte vivió una loba que amamantó a dos pequeños niños llamados Rómulo y Remo. Al crecer, estos hermanos decidieron fundar la ciudad a las faldas del lugar que los había visto crecer. En una pelea por el mando de la ciudad, Rómulo mata a Remo. Leyenda o no, la historia muestra que hacia el año 700 a.C. ya había asentamientos en la zona. Estos asentamientos fueron el inicio de la ciudad. El monte Palatino era el lugar idóneo ya que permitía el cultivo y la ganadería y estaba cerca del río Tíber. De modo que aquí empieza la historia de la ciudad eterna. Hasta nuestros días han llegado numerosos testimonios de la antigua Roma y al subir este monte puedes visitar el Palacio Domus Flavia, la casa de Livia y la casa de Augusto, antigua residencia del emperador. Después de atravesar los jardines de Farnesianos, (estos datan del siglo XVI) puedes sentarte a contemplar el Foro Romano que cae a tus pies como si se tratase de una postal.
Fontana de Trevi
La fuente más famosa de Roma y ¿Quién sabe? Quizá haga tus deseos realidad…
Vive La Dolce Vita
Acércate a la fuente y lanza una moneda para asegurar tu vuelta a Roma. Lanza dos si quieres que llegue un nuevo romance. Y lanza tres si quieres que se convierta en matrimonio. Eso reza la tradición de arrojar monedas a la fuente. Cierto o no, lo que es seguro es que miles de visitantes lo hacen a diario. La Fontana di Trevi fue construida en el siglo XVIII en el lugar donde termina el acueducto Aqua Virgo, manantial que abastecía a la ciudad de Roma desde la época imperial. Quizá te cueste trabajo encontrar la fuente y es que es sorprendente que se construyera en un lugar tan recóndito. A su alrededor, las gradas son el lugar perfecto para contemplarla aunque suelen estar muy solicitadas. Por el día, esta plaza es un punto muy transitado debido a que es uno de los grandes reclamos de Roma, te recomendamos que esperes a que caiga el sol. La plaza está mucho más tranquila y la iluminación de la Fontana te encandilará, de hecho, puede ser el sitio idóneo para cenar. Hay unos cuantos restaurantes alrededor, es cierto que no son baratos pero puede ser el lujo que te quieras permitir en Roma.
Barrio del Trastevere
Posiblemente es el barrio con más encanto de Roma
Cruza el Tíber y vuelve al pasado
El Trastevere es el barrio bohemio de la ciudad de Roma. A lo largo de su historia siempre ha sido la zona alternativa, la otra cara de la ciudad. Su nombre ya nos indica que aquí las cosas son diferentes. Trastevere proviene de la expresión Tras el Tíber, que quiere decir al otro lado del Tíber. Durante la época del Bajo Imperio fue el lugar donde se asentaban todas las culturas que no eran cristianas. Después, el papado decidió levantar tres iglesias cristianas para demostrar quien mandaba en Roma. Gracias a ello, ahora, puedes ver la Basílica de Santa María, la Porta de San Pancrazio y la Iglesia de San Pietro in Montorio, lugar emblemático de Roma por ser el lugar donde, según cuenta la tradición cristiana, fue crucificado San Pedro. Todo este barrio respira un aire diferente al de Roma, se amontonan las casas medievales sobre la calzada romana, aún mantiene una gran vegetación propiciada por estar a la orilla del río. Por la noche, el barrio se transforma en una de las zonas con más ambiente nocturno de la ciudad. Sentarte a cenar en una de las terrazas junto al Tíber es uno de los privilegios de Roma.
La pizza
No podrás decir que te gusta la pizza hasta que pruebes una en Roma
Comida sencilla pero de sabor inigualable
¿Sabías que esta popular comida era el principal sustento de las clases más bajas de la ciudad? En realidad, no estaban tan elaboradas como las que encontramos hoy en día pero la pizza es conocida como la comida de los pobres. Se basaban en una torta de pan que a menudo sobraba en cualquier restaurante o casa con un poco de salsa de tomate, también muy habitual en Roma, y encima se echaban las sobras que encontraban de cualquier comida: carne, verduras, pescado... De esta manera comenzó a elaborarse este delicioso plato. Ahora, en Roma, encontrarás tantos tipos de pizza como alcances a imaginar. Es uno de los manjares de la cocina italiana y, habitual en todos los puestos de comida. De hecho, encontrarás gran cantidad de puestos de comida para llevar. Habitualmente, son pizzas de elaboración casera y suelen ser muy sabrosas y baratas. Si te encuentras visitando la zona del Coliseo te proponemos que cojas unas porciones de pizza, una copa de lambrusco y te unas a la gente que se sienta a comer plácidamente en el gran parque que rodea al monumento.
Delicatessen en la Via Della Croce
Si te gusta la gastronomía y quieres llevarte algún producto, este es tu lugar
Productos típicos italianos de buena calidad
La Via Della Croce corre paralela a la conocida Via Condotti y forma parte de la ruta de tiendas más conocida de Roma. Tanto esta calle como sus alrededoresestán bien para comer o para comprar un recuerdo gastronómico. Se trata del paraíso de las tiendas de gastronomía típica italiana. En estas tiendas encontrarás todo tipo de productos en todas sus variedades (pasta, café, vinos...) y no son expresamente más caras que el resto de establecimientos. Eso sí, no olvides que estás en la zona de shopping de Roma.
Restaurante Etabli o el Vino italiano
En esta vinoteca descubrirás que en Italia también hay grandes vinos
Degusta un buen vino italiano
Visitar Roma es sinónimo de visitar uno de los sitios con mejor gastronomía del mundo. Al igual que todos los países con costa mediterránea, Italia posee un clima que favorece su cocina. Sí ,es cierto que la tradición también ha hecho su parte. Todo el mundo conoce la pasta, el café y los postres pero no hay mucha gente que sepa que aquí también está la cuna de unos de los mejores vinos del mundo. Su tradición vinícola se remonta a los griegos, predecesores del Imperio Romano y se ha expandido a todo el territorio del país. Prácticamente todas las regiones tienen sus viñedos y producen sus propios vinos. En Roma encontrarás una gran oferta de vinotecas y, sí, te puedes fiar del vino de la casa en casi todos los restaurantes pues suelen tener unas cosechas excelentes. Toda la zona del Testaccio y del Trastevere es muy recomendable para probarlos. Es muy popular un lugar llamado Etabli. Este local situado en la calle Vicolo delle Vacche, 9 se ha convertido en una mezcla de música y vino: disfrutarás del mejor vino viendo música en directo.
Antico Caffé Greco
Conoce el lugar donde se reunía la clase cultural en Roma y disfruta de un buen café
La cafetería más antigua de Roma
A pesar de que el café es uno de las delicias típicas de Roma y que estamos en una cafetería, no hemos venido por este motivo. Al menos, no es el único. En el Antico Caffe Greco se ha detenido el tiempo. Y se ha detenido en el siglo XIX. Es la cafetería más antigua de Roma y la segunda de toda Italia. Y aquí, en el número 86 de la Via Condotti se reunían los poetas, literatos y artistas de Roma. En estas mesas se desarrollaron las largas conversaciones entre Goethe, Keats, Lord Byron, Stendhal, Richard Wagner y un larguísimo etcétera. Desde entonces se ha mantenido abierta e intacta esta cafetería. Ahora, en la actualidad, se mantiene como un punto importante de la actividad literaria de Roma y es un lugar habitual para la presentación de libros, ruedas de prensa de escritores y charlas de críticos y gente cercana al mundo de la industria de la editorial. También es usual encontrar personajes públicos desde políticos hasta cantantes tomando un café en este lugar. Si eres aficionado a la literatura y al arte en general, te gustará sentarte a tomar algo aquí. Por cierto, el café es excelente.
El café
¿Qué mejor descanso que tomarse un buen café? Mira a tu alrededor y verás que no eres el único
El café como forma de vida en Roma
Para los italianos el café no es una bebida, es una seña de identidad y, casi, una forma de vida. El café forma parte del día a día del romano. Significa un momento de descanso en la rutina diaria o el momento social del día. Sea como sea tienen, posiblemente, el mejor café del mundo. Es curiosa la cantidad de costumbres que se han desarrollado y asociado en torno tomar un café. Es habitual encontrar a media mañana las cafeterías llenas de gente tomando un café al paso, o sea, de pie y sobre la marcha así como reuniones de comerciales con clientes. Las variedades son interminables ya que cada uno lo toma a su gusto pero tiene un reconocimiento especial el Capuccino, con leche y espuma por encima y, en muchas ocasiones, un toque de canela. Delicioso. En la mayor parte de las tiendas de comida y las llamadas delicatessen venden todo tipo de variedades. Y puede ser una acertada opción como recuerdo o como regalo para alguien. Posiblemente no lo puedas encontrar fuera de Roma y, si es así, la diferencia de precio será muy grande.
El Limoncello
Y después de una buena comida, ayuda a la digestión con un limoncello
El licor italiano por antonomasia
Este brebaje típicamente italiano es uno de las bebidas más refrescantes para los días de sol y caminata. Dicen que su origen se remonta a un pueblecito a las afueras de Nápoles llamado Sorrento, al sur de Italia. Se cuenta que los limones de este lugar tenían un color y sabor mucho más intenso que el resto y también un tamaño más grande y que, a partir de estos limones se comenzó a destilar el limoncello. Es imposible saber con exactitud la fecha y el lugar. Lo que sí sabemos es que es una bebida habitual en toda Italia. Está hecho a partir de limón, azúcar y alcohol. ¡Cuidado!, puede llegar a tener 25 grados de alcohol por lo que tomarlo sin control te puede jugar una mala pasada. Es habitual tomarlo después de las comidas, en la sobremesa, pues es una bebida muy digestiva y ligera. No obstante, también es habitual tomarlo en fiestas y por la noche, sobre todo en la temporada estival, cuando hay un ambiente más callejero. Hay muchas formas de tomarlo aunque se recomienda siempre muy frío. También es típico servirlo como si se tratase de horchata o limonada.
Helados
No puedes estar en Roma y no probar un riquísimo helado
Si los helados italianos tienen fama…
La elaboración de los helados se remonta a la civilización china, muchos siglos antes de la muerte de Jesucristo o quizá a la civilización egipcia o tal vez fue Marco Polo el que encontró esta receta en sus viajes y lo introdujo en el viejo continente. Es imposible saber cual es el origen. Pero sí es cierto que Italia y Roma poseen una larga tradición en la elaboración de los helados y que, estos, son una de las delicias de la cocina italiana. De hecho, esta tradición comenzó como un placer de reyes ya que era costosísimo conseguir conservar el frío hielo hasta que llegaba a la mesa de los comensales. Por ello, tan solo la realeza y las clases altas podían permitírselo. Eso sí, fomentaron que los artesanos experimentasen consiguiendo unos postres riquísimos. En Roma encontrarás multitud de heladerías y de puestos de venta ambulante muy apetecibles pero por si acaso entra en tu ruta te recomendamos dos locales muy populares. Uno es Giolitti en la Piazza della Colonna y otro es Della Parma que está a continuación, en la misma calle. En ambas se elaboran los helados diariamente y te sorprenderá la variedad de sabores.
Alle Fratte di Trastevere o cenar en el Trastevere
En el Trastevere encontrarás numerosas terrazas donde descansar, pero algunas tienen algo especial
Un restaurante con encanto en el Trastevere
En el barrio del Trastevere siempre es primavera. Este montón de calles forman, sin duda, el barrio con más encanto de Roma. A orillas del río Tíber, la calma que se respira en sus calles hace que todo transcurra con más calma. Además, el propio río y la gran cantidad de árboles y de vegetación que sale por todas partes hace que la temperatura sea más agradable, sobre todo en los días de verano. Por ello te proponemos que pruebes alguno de los numerosos bares y restaurantes con terraza que están abiertos. Cenar viendo caer el sol sobre la ciudad, alumbrado por las luces del propio Trastevere puede ser una de las experiencias más inolvidables que tendrás en Roma. Todos los establecimientos tienen una gran cocina pero si quieres ir a tiro hecho te proponemos uno: el restaurante Alle Fratte. Se trata de un restaurante que hace esquina en la calle Via Delle Fratte Di Trastevere, 49-50. No es muy grande pero tiene un encanto especial y aunque su interior tiene una decoración preciosa, te recomendamos que pases un ratito antes de cenar y reserves mesa en la terraza. Si te sientas allí entenderás porqué.
Trattoria Lilli o comer en El Coliseo
Disfruta de un buen plato de pasta con vistas al Coliseo, ¿algo más típico?
Uno de los mejores sitios para comer
Si lo que quieres es comer en el centro, te recomendamos que visites la Trattoria Lilli, junto al Coliseo. Este restaurante lleva abierto desde 1964 y desde entonces siempre ha pertenecido a la misma familia. Poco a poco se ha ido abriendo un hueco convirtiéndose en una institución dentro de la gran cantidad de restaurantes de la zona. Y es que la Trattoria Lilli tiene dos máximas: mostrar las variedades de la comida italiana y comer barato. Así lo exponen ellos. Si bien es cierto que se debe ser precavido a la hora de escoger restaurante en el centro de Roma, creemos que este sitio te encantará. En su interior hay tan solo un comedor decorado con fotografías que muestran las diferentes etapas de la ciudad y del restaurante. A este rincón de Roma no le hace falta nada más. Después, elige tu menú o déjate aconsejar. Puedes probar todas las variedades de pasta, pizza y platos típicos italianos. Y además, ¡sus postres son famosos en toda Roma! Si hace buen día o buena noche, puedes elegir comer o cenar en su terraza mientras contemplas el Coliseo. Eso sí, te recomendamos pasar a coger mesa un rato antes de llegar pues puede estar bastante solicitado.
La pasta italiana
Estás en el lugar donde probablemente se coma la mejor pasta del mundo… ¿vas a dejar escapar la oportunidad?
Mamma mia!
Tan típico como antiguo. Pero no por ello deja de ser el centro de la gastronomía italiana y también lo más habitual en los obsequios y recuerdos que los viajeros se llevan de Roma. A pesar de que solamente se trate de una mezcla de cereal molido con agua y que puedas encontrarlo en numerosos lugares de todo el mundo, la pasta italiana guarda en sí misma un secreto que la hace especial. Hay infinitos tipos: de colores, fresca, con formas, rellena y un largo etcétera. Aquí entra el gusto de cada uno. Sin embargo, te hacemos algunas recomendaciones. Si quieres probar la pasta en un restaurante, te aconsejamos que te alejes un poco del centro, no mucho, basta con que te acerques al barrio del Trastevere o, mejor aún, a Testaccio. En estas zonas hay una gran cantidad de trattorias o restaurantes típicos italianos mucho más asequibles y, sobre todo, con una mejor calidad en su cocina. En el centro el propio hecho de estar tan atestados de gente provoca que la comida en ocasiones no sea tan suculenta como podría esperar. Si lo que quieres es comprar pasta como recuerdo te aconsejamos cualquiera de los puestos artesanos que hay por el centro. Encontrarás todo tipo de variedades.
Algunos museos curiosos
Si tienes tiempo, te aconsejamos otros lugares menos conocidos pero igual de importantes culturalmente
Ruta alternativa que te sorprenderá
La ciudad eterna tiene tanta historia en sus calles que es una de las ciudades con mayor número de monumentos y museos del mundo. Las visitas casi obligatorias son muchas. Pero si estás el suficiente tiempo en la ciudad o te apetece una ruta más alternativa, te contamos algunos lugares curiosos. En primer lugar, te recomendamos que visites la Casa di John Keats – Mary Shelley, junto a Piazza Spagna. Este lugar se ha convertido en un punto de veneración a la literatura. Además de la historia del escritor inglés afincado en Roma, se propone un recorrido por el romanticismo a través de su patrimonio. Entre otras cosas, está expuesto un manuscrito de Oscar Wilde. Otro curioso lugar es el Museo Nazionale delle Paste Alimentari, en la Piazza Scanderberg a pocos metros de la Fontana de Trevi. Te mostrará una forma diferente de entender la historia de Roma a través de su gastronomía. Por último, para los amantes de lo paranormal, a orillas del Tíber, junto al Ponte Cavour abre sus puertas el Museo Delle Anime Dei Defunti. Este museo está dedicado a las almas que esperan en el purgatorio y a las manifestaciones terrenales de éstas. ¡Toda una experiencia!
Museo Vaticano
Con los años, la ciudad del Vaticano ha ido recopilando importantes obras de arte que no puedes perderte
Colección de arte en el Vaticano
Este museo comienza con la colección de arte que poseía el papa Julio II y que, con su nombramiento, trasladó al espacio vaticano. A partir de aquí, a través del legado de cada papa y de familias particulares de Roma, se fue tejiendo una de las mayores exposiciones de arte del mundo. Los Museos Vaticanos son la mayor aportación al mundo del arte que ha hecho el Estado del Vaticano. Aunque se unificaron con la construcción y el establecimiento como residencia papal de San Pedro Vaticano, hay otros puntos de interés para la visita de estas colecciones. Por ejemplo, el Jardín Cuadrado conocido como Patio Octogono (Patio de las Estatuas del Belvedere), ubicado frente a la Pinacoteca Vaticana. A lo largo de este precioso jardín puedes contemplar las esculturas con las que se fundó el museo en el XVI. También es muy recomendable el Museo Etrusco fundado por el papa Gregorio XVI que recoge testimonios de la civilización etruria, forma inaudita de conocer esta civilización y su influencia para Roma. Esta aportación el Vaticano te brinda una oportunidad de ver la historia de Roma.
Casa de Goethe. Circuito alternativo.
Un lugar alternativo en Roma donde apreciar la obra de Goethe, enamorado de Roma
Visita la casa del autor de Fausto
En el número 18 de la Vía del Corso, casi llegando a la Plaza del Popolo se encuentra la casa de Goethe, una de las figuras más importantes de la literatura del siglo XVIII-XIX, fundador del romanticismo y autor de la obra Fausto. En 1786 el poeta se trasladaba a Roma donde fundaba en su residencia uno de los centros de reunión para los escritores y artistas de la época. Goethe fue una persona muy activa políticamente por lo que dejó una gran huella en la ciudad. Además siempre manifestó su amor por la ciudad de Roma a la que dejó su residencia tras su fallecimiento. Por ello, la capital italiana recoge el testigo y funda la Casa Di Goethe, una exposición permanente sobre la vida y obra del escritor. Se trata de uno de los centros más importantes del mundo sobre romanticismo debido, entre otras cosas, al gran legado que dejó el autor, multitud de documentación, dibujos y manuscritos así como una biblioteca completa con sus influencias. Ahora este centro también organiza otras exposiciones temporales de artistas relacionados bien con el autor o con el movimiento. Es de los más importantes puntos del romanticismo del mundo y es uno de los rincones más desconocidos de Roma.
Visita al MACRO
Además de monumentos históricos, en Roma también hay sitio para el arte moderno
Regreso al futuro
Uno de los encantos de la ciudad eterna es el hecho de tener el arte en la calle. Roma es una ciudad en la que tanto la época del Imperio como el Renacimiento han hecho del centro de la urbe un museo en sí mismo. También el barroco y el romanticismo han hecho mella. Pero eso no quiere decir que Roma no mire hacia delante en cuanto a corrientes artísticas se refiere. El MACRO es uno de los espacios más innovadores del siglo XX y cuenta también con una fama mundial. La visita al MACRO es tan importante por fuera como por dentro. Es decir, el propio edificio (una restauración de un antiguo edificio industrial dedicado a la fabricación de la cerveza Peroni) es una obra arquitectónica muy innovadora y ella misma se ha convertido en un reclamo de la ciudad. En su interior, seis enormes salas exponen colecciones de arte de los años 60, pop-art y una gran variedad de manifestaciones artísticas del XX así como de nuevas tendencias. Uno de sus principales atractivos es la exposición permanente de las obras del llamado Grupo Fórmula 1 formado por Perilli, Accardi y Dorazio. Solamente un paseo por los alrededores ya merece la pena.
El Foro Romano
Solo con una visita te harás una idea de la grandiosidad del Imperio Romano
Visita al centro de vida romano
Como si fuera una instantánea de un día de diario de la época del Imperio se ha mantenido hasta nuestros días el Foro Romano. Este conjunto de templos, calles y muros guardan la vida cotidiana de Roma durante la República. Aquí se mezclaban a diario los comerciantes, los vecinos, la política de Estado y la prostitución. Al fondo el monte Palatino vigilaba la jornada. Este foro se formó hacia el año 500 a.C. al empezar a ser el punto de reunión para el trueque y el cambio de mercancías. Siglos después, el desarrollo del Imperio hizo que se necesitara un lugar donde instalar la administración de la ciudad y se utilizaron varios edificios de este foro para ello. Aún se mantiene en pie el templo de la Concordia, donde el Senado instaló sus dependencias. El templo de Castor y Pólux, la basílica Julia y el Tabulario también guardan los secretos de los grandes días del Imperio. En realidad, el Foro Romano ocupaba una parte más extensa de la ciudad, ya que se refiere al centro de la urbe, a la zona donde estaba la actividad de la urbe. El paso del tiempo ha hecho que gran parte de ello quede enterrado entre las nuevas edificaciones pero aún puedes contemplar estas ruinas e imaginar cómo era la gran Roma del Imperio.
Termas del Caracalla
Antiguas termas romanas en las que sus habitantes venían a relajarse y conversar con sus vecinos
Viaje en el tiempo
¿Has oído hablar alguna vez de las termas romanas? Las termas del Caracalla se mantienen en pie como si quisieran enseñarte los lujos de la civilización romana. En su interior, tras unos muros de casi 30 metros de altura, guardan el entramado arquitectónico más complejo de la ciudad. Aunque pueda parecer un tópico, es impresionante como, en el año 216, empezaron a funcionar estos sistemas de agua caliente. Fueron construidas durante el mandato de Marco Aurelio. Había varios circuitos termales más repartidos por la ciudad ya que eran una de las grandes demandas de los ciudadanos. De hecho, eran de uso gratuito. Por dentro, además de diferentes zonas de baño con diferentes temperaturas, había una decoración y una ornamentación pensada para la relajación del bañista. Los vecinos acudían a estas termas a encontrarse y conversar con sus conciudadanos, por ello, disfrutaban también de grandes zonas de descanso. Aunque ya no puedes contemplar su decoración original, sí podrás visitar todos los rincones de esta ruta de aguas calientes y después puedes sentarte a sus puertas, como hacían los antiguos romanos y contemplar cómo cae el sol sobre la ciudad de Roma.
Mercado de Trajano
Restos del centro comercial de la antigua Roma, que reflejan el carácter mercantil de sus habitantes
Quizá sea el primer centro comercial de la historia
Este antiguo mercado es el primer ejemplo de centro comercial de toda la historia de las civilizaciones. Roma tenía una enorme actividad comercial debido a la proximidad del puerto. Por este motivo, entre los años 100 y 110 d.C. el emperador Trajano ordenó a Apolodoro de Damasco, uno de los arquitectos más afamados de la época, la construcción de este enorme mercado cubierto. Levantó seis plantas que llegaron a albergar 150 negocios en los 2.000 metros de superficie que ocupaba y se ubicó en mitad de la Via Nazionale, a pocos metros de la Plaza de Venecia, convirtiéndose en el núcleo comercial de una ciudad que, por aquel entonces, ya sumaba un millón de habitantes. Inexplicablemente, el mercado de Trajano no ha gozado de la popularidad de otros monumentos romanos como el Coliseo lo que ha hecho que el edificio cayera en el olvido. Antes de ser declarado en ruinas se llevó a cabo una cuidadosa reforma y ahora se puede volver a visitar. Es sorprendente que el edificio se mantenga prácticamente intacto a pesar del paso del tiempo. Desde su patio central se pueden ver cada uno de los arcos que daban luz a las antiguas tiendas así como cada uno de los acabados en mármol de las paredes.
Las Catacumbas
Pasajes subterráneos a lo largo de la ciudad que se construyeron con cerca de 750.000 tumbas
Conoce la parte más oculta de Roma
Estos kilométricos túneles han albergado innumerables leyendas e historias en su interior. Y no es menos inquietante el verdadero origen de estos panteones. Su origen se remonta a la Roma del siglo V. Tras el edicto de Milán en el año 313 cesaron las persecuciones contra los cristianos. Éstos se oponían al ritual de incineración pagano y preferían enterrar a sus muertos. Sin embargo en Roma estaba prohibido realizar enterramientos en la ciudad. Por ello, comenzaron estas enormes obras en las canteras de las afueras de la ciudad. De ahí viene su nombre que significa "junto a la cantera". Son muchas las catacumbas que hay en la ciudad y son tan intrincadas sus redes que se conectan entre sí. Las más recomendables son: las catacumbas de San Sebastián (en la Via Appia Antica, 136), las de San Calixto (en el 126 de la misma calle), las de Priscila (Via Salaria, 430) y las de Domitila (Via delle Sette Chiese, 280). Aunque la historia pueda parecer un poco truculenta, poder contemplar los nichos de los primeros cristianos así como las propias catacumbas es una visita insólita. Es un viaje a través de las entrañas de la ciudad de Roma.
Museos Capitolinos
Se considera una visita imprescindible por la cantidad de obras de arte que guarda en su interior
¿Quieres ver el primer retrato esculpido de un personaje vivo?
Roma juega con ventaja. La ciudad eterna ha sido tantas veces el punto de eclosión de las corrientes artísticas que ha atesorado tantos testimonios artísticos de tantas corrientes y momentos que juega en otra división. Se dice que en Roma no hace falta visitar museos porque la propia ciudad ya es una exposición, no solo de la época romana y del Renacimiento sino también de la Edad Media, el Barroco, Romanticismo y las corrientes del siglo XIX: dejaron la ciudad plagada de edificios, plazas, monumentos y otras construcciones que hacen de Roma un museo de la humanidad. Sin embargo, la ciudad también quería abrir sus propias galerías y los Museos Capitolinos situados en la Plaza del Campidoglio son dos edificios con una colección sin parangón. Este doble museo partió de la donación de una colección de bronces del papa Sixto XIV en 1491, fundando así uno de los museos más antiguos del mundo. Se trata del Palacio de los Conservadores y del Palacio Nuevo. No te dará tiempo a contemplar todas sus obras pero sí debes visitar las obras de Tiziano, Caravaggio, Rubens y Tintoretto así como la escultura de la loba capitolina, madre de Rómulo y Remo y fundadora de la ciudad.
Capilla Sixtina
Sus paredes guardan los secretos de los cónclaves
Admira la belleza de sus frescos
Poco se puede decir de uno de los lugares más importantes del mundo. Se dice que todas las personas deberían visitar, al menos una vez en la vida, esta capilla. Se encuentra situada a la derecha de la basílica de San Pedro Vaticano. Y aquí se desarrollan los cónclaves más importantes y secretos del mundo. En su interior se reúnen los cardenales para decidir quien será el próximo papa de la iglesia, mientras, millones de personas esperan expectantes ver salir el humo blanco o negro por la chimenea. Pero lo que miles de visitantes quieren ver cada día son los frescos de Miguel Ángel Buonarroti que vigilan desde el techo de esta capilla cada acto que aquí se lleva a cabo. Estos frescos unen a cristianos, musulmanes, judíos o simplemente amantes del arte entre sí. Fue un encargo del Papa Sixto IV que Miguel Ángel pintó entre 1508 y 1512. En ellos también intervinieron otros pintores como Botticelli, Perugino y Luca. En el centro del conjunto de frescos, el autor dibujó nueve escenas, nueve pasajes del Génesis. Pero ¿sabías que el pintor dejó un mensaje secreto de amor universal contrario a los principios de la iglesia oculto en estos grabados?
El circo Máximo
Antigua pista de carreras en la que competían hasta doce carros
Preparados, listos…
El Circo Máximo te hará sentirte pequeñito. Cuesta creer que en el año 600 a.C. el Imperio Romano levantase este gigantesco estadio de 600 metros de longitud y 250 metros de anchura. Claro que en un primer momento lo que hicieron fue utilizar el valle que queda entre los montes de Aventino y Palatino para que los espectadores se sentasen en la propia ladera de las colinas. Sin embargo, ya con el popular emperador Julio César, hacia el siglo I d.C. contaban con gradas para 300.000 espectadores, ¡el triple que el estadio Santiago Bernabeu del Real Madrid! Ahora puedes adentrarte en las instalaciones, pasear entre las gradas y recrear las famosas carreras de cuadrigas. Han sido muchas las películas de cine que han querido recrear estas carreras, la más conocida es la escena de Ben Hur rodada en el propio Circo Máximo. Esta enorme elipse también era utilizada para el acto de presentación y de coronación de los nuevos emperadores, actos a los que acudía toda la ciudad. Con el paso del tiempo fue perdiendo interés y acabó convirtiéndose en una cantera. No obstante, sigue siendo uno de los lugares más impresionantes del legado romano.
Arco de Tito
Aunque su historia no es admirada por muchos, no deja de ser una obra arquitectónica muy importante en la ciudad
El controvertido arco de Tito
Este homenaje al emperador romano es una vergüenza para los judíos. De hecho es sabido que la comunidad judía que vive o visita la capital italiana evita este lugar. Te explicaremos la causa. Corría el año 67 y el futuro emperador Tito encabezó un movimiento contra los judíos que acabó convirtiéndose en la Primera Guerra Judeo Romana y que se saldó con la quema de Jerusalén. Varios años después de terminar el conflicto, en el año 79 el Imperio lo nombraba máximo dirigente, en parte, gracias a este tipo de victorias. Tras su muerte, tan solo dos años después de que comience su mandato, en el año 81, se levantó este monumento en honor al emperador. Sobre esta construcción recae la leyenda de que cualquier judío que atraviese el arco dejará de serlo y dejará de ser reconocido como tal. Más allá de las leyendas, este es el motivo por el que, a pesar del paso del tiempo, la comunidad judía se sigue avergonzando de este arco. Dejando la parte truculenta al margen, el Arco de Tito está situado en la Via Sacra. Con estas construcciones el Imperio mostraba a su pueblo la fuerza y la grandiosidad de su tierra y de su ejército.
Arco de Constantino
Su curiosidad es que está hecho con materiales de otros monumentos
Es el arco del triunfo más moderno de Roma
El Arco de Constantino es la frontera entre el Foro Romano y el Coliseo. Como ves, apenas puedes dar un paso en Roma sin encontrarte con monumentos de la época del Imperio Romano. Es una enorme suerte que su arquitectura fuera tan avanzada y gran parte de sus obras hayan llegado hasta nuestros días. Es el más moderno de los arcos de triunfo construidos en Roma, fue erigido en el año 315 y rendía homenaje a la victoria de Constantino I el Grande en la batalla del río Milvio. A pesar de ser uno de los más grandes (consta de tres arcos con una altura de 21 metros y una longitud de 25) es el mejor ejemplo de construcción romana. La bandera del Imperio era su ejército, no era para menos, consiguieron el mayor de todos los tiempos. Esto era utilizado para mantener al pueblo ordenado. Es decir, había un doble mensaje: con este tipo de construcciones se mostraba que los romanos formaban parte del imperio más grande del mundo y, a su vez, que era necesario que se mantuvieran obedientes a él. Por ello, toda la ciudad está llena de todo tipo de monumentos y homenajes a guerras, batallas y militares.
San Clemente
En su interior guarda importantes tesoros, como sus mosaicos del siglo XII
Templo sobre templo
En la basílica de San Clemente el tiempo se ha quedado detenido. En su interior guarda los secretos de la civilización romana. Este santuario se construyó alrededor del siglo XII, en plena Edad Media. Sin embargo, hace algunos años se descubrió que estaba construido sobre un templo anterior. Un templo levantado hacia el siglo IV y que rendía homenaje a San Clemente. Allí descansan los restos de este papa del siglo I que fue reivindicado como uno de los defensores del cristianismo cuando aún era una religión perseguida en Roma. A modo de curiosidad, este papa fue el que introdujo la palabra Amén en la liturgia de la Iglesia. Pero la historia no termina aquí. Una investigación arqueológica llevada a cabo en la basílica descubrió que había un tercer templo secreto bajo el suelo de los anteriores. Un antiguo templo secreto del siglo I que veneraba al dios Mitra, una divinidad de origen persa. Se dice que en este lugar se celebraron rituales cristianos cuando esta religión era proscrita en el Imperio y reinaba el paganismo. Puedes descender a través de las escaleras hasta este tercer piso e imaginar las reuniones de estos primeros cristianos que fueron perseguidos hasta el siglo IV.
San Juan de Letrán
Esta basílica tiene el honor de haber sido la primera iglesia construida en Roma
La catedral de Roma
Estás ante la iglesia más antigua del mundo. De ahí el título que ostenta en su fachada: madre y cabeza de todas las iglesias de la ciudad de Roma y de toda la tierra. Se trata, ni más ni menos, que del inicio de la iglesia cristiana tal y como la conocemos hoy en día. Corría el siglo III y con la reconversión del paganismo al cristianismo, el emperador Constantino I consiguió que cesasen las persecuciones a los cristianos. Entonces cedió estos terrenos para que el papa se estableciese allí (se cree que era el papa Melquíades). De este modo, San Juan de Letrán fue la morada papal hasta el siglo XIV, momento en el que se decide trasladarse al Vaticano. No todo el mundo lo sabe pero esta iglesia es la catedral de Roma y es el modelo de todo el resto de iglesias. Es una pena que debido a varios de los brutales incendios que asolaron la ciudad de Roma se hayan perdido gran parte de los monumentos que decoraban el exterior de la iglesia. Aunque aún puedes contemplar el obelisco, el punto más alto de toda la ciudad, con 45 metros y fue traído del Circo Máximo.
Santa María Mayor
Situada en el punto más alto de Roma es la única basílica que conserva su planta basilical intacta
Una de las cuatro basílicas mayores de Roma
Coronando la cima de la colina de Esquilino, la más alta de las siete colinas de Roma, se sitúa la basílica de Santa María la Mayor. Cuenta la leyenda que el lugar fue un capricho de la propia virgen. Se dice que a mediados del siglo IV, el papa Liberio vio a la Virgen María en sueños y que ésta le pidió que le construyese un templo en su honor y que ella le mandaría una señal para indicarle donde debía construirla. Al despertar, el papa, corrió las cortinas y encontró la colina de Esquilino completamente nevada. Esta fue la señal interpretada por Liberio. En la cima de esta colina se construyó la Basílica di Santa María Maggiore, apodada la Basílica de la Virgen de las Nieves. Desde que terminara el tratado de Aviñón, se convirtió en una de las cuatro basílicas papales, lo que quiere decir que es uno de los lugares donde el pontífice traslada su residencia según la época del año. De hecho, el 5 de agosto de cada año, se conmemora el llamado Día de las Nieves en la que el propio papa ofrece una multitudinaria misa a los fieles desde los balcones de la basílica.
Castillo de Sant´Angelo
El Mausoleo de Adriano quizá no sea lo más bonito de Roma, pero tiene mucha historia detrás
Fortaleza a orillas del Tíber
Este gigante de piedra es conocido como el guardián de Roma. Como si fuese un enorme gladiador, se levanta a orillas del río Tíber. Para llegar a él deberás atravesar el Puente de Adriano (ahora exclusivamente peatonal). Sus enormes muros de piedra fueron levantados bajo el mandato del emperador Adriano hacia el año 135 d. C. Cuesta creer que lo que el emperador tenía en la cabeza era hacer un mausoleo familiar, ¡en su pequeño huerto! El edificio, a diferencia del resto de monumentos de Roma, no es especialmente bonito y no goza de una gran popularidad dentro de la sociedad romana. Pero lo que sí es cierto es que, debido a su arquitectura, ha servido de torre de defensa ante los muchos ataques que sufría Roma en la época del Imperio. De hecho, tanto emperadores como papas han utilizado este edificio como residencia en épocas de conflicto. Además te confesamos un secreto, poca gente sabe que el castillo está conectado con el Vaticano por un salvoconducto subterráneo para poder trasladar al papa en caso de amenaza. Quizá por estas misteriosas historias, este castillo es uno de los edificios romanos que más veces ha aparecido en novelas y películas de cine.
San Pablo Extramuros
A las afueras de Roma, es una de las cinco iglesias más antiguas de Roma y Patrimonio de la Humanidad
La hermana pequeña de la Basílica de San Pedro
Has de saber que la historia de este lugar está a mitad de camino entre lo violento, lo salvaje y el sentido del honor. Corrían los tiempos del mandato de Nerón y en aquellos años los cristianos sufrieron una implacable persecución. Entre los ejecutados se encontró San Pablo, mártir de los gentiles, quien fue ajusticiado a las afueras de la ciudad de Roma. Años después, llegó el emperador Constantino y con él el reconocimiento a los cristianos. Fue este emperador el que decidió rendir homenaje al mártir caído allí donde residían sus cenizas. Para ello levantó alrededor de la tumba de San Pablo la segunda iglesia católica más grande del Imperio después de la de San Pedro y, también las más antiguas de la Iglesia. El hecho de estar situada fuera de las murallas de la antigua Roma la bautizó como San Pablo Extramuros o San Pablo más allá de la muralla. Puedes visitar el sepulcro del mártir y pasear por el precioso y vasto parque que lo rodea. Estás a las afuera de Roma y puedes contemplar las antiguas ruinas romanas desde allí. Pero al caminar recuerda que estás en uno de los sitios donde cambió el mundo: son los comienzos de la Iglesia Católica.
El Coliseo
Quizá sea el monumento más importante, por algo recibe más de 6 millones de visitas al año
Contempla más de 1900 años de historia
Las ruinas del Coliseo son el lugar perfecto donde sentarte y recrear la vida del Imperio Romano. Aún puedes contemplar las gradas donde se sentaban los romanos y se entretenían viendo carreras de cuadrigas o violentas luchas entre gladiadores y leones. Puedes imaginar las violentas y sangrientas luchas entre condenados y animales salvajes a las que el pueblo estaba acostumbrado. Incluso jaleaban a cualquiera de los contrincantes entre risas y aplausos haciendo propio aquello de pan y circo. Este Coliseo o Anfiteatro Flavio fue inaugurado por el emperador Tito hacia el año 80 d.C. Ocupó las ruinas que había dejado uno de los incendios más devastadores que conoció la capital del Imperio y la intención del edificio fue la de demostrar que la gran Roma había resurgido de sus cenizas. Ahora puedes pasear entre sus muros y contemplar los más de 180 metros que separan las gradas de esta enorme construcción elíptica. Todos sus arcos están cuidadosamente decorados con detalles jónicos, dóricos y corintios y tardaron en terminarlo casi un siglo. Esta construcción le daba al pueblo no solo espectáculos y violencia sino una bandera y una patria de la que formaban parte: la patria del Imperio Romano.
San Pedro del Vaticano
El centro del catolicismo y una de las obras arquitectónicas más importantes del mundo
Respira historia y arte en un mismo lugar
Este impresionante edificio no es solamente la basílica más grande del mundo, es también la sede de la religión más influyente de la humanidad. Sus dimensiones impresionan tanto como la historia que esconde su interior. La primera basílica data del siglo I y fue levantada por Constantino, emperador que oficializó el cristianismo en el Imperio. Pero después, durante el Renacimiento se levantó la nueva construcción. Un desafío arquitectónico cuya construcción duró más de 150 años y que, en varias ocasiones, estuvo a punto de abandonarse. Todo ello se levanta sobre la tumba del apóstol San Pedro. En la actualidad, deberás cubrirte por debajo de las rodillas y por encima de los hombros para visitar este sagrado lugar. Presta atención a cada metro que recorras. La estatua ecuestre de Constantino, de Bernini y La Piedad de Miguel Ángel son algunas de las obras más importantes del lugar. Pero no dejes de visitar la gruta de los papas, bajo el suelo de la basílica. En esta ruta interior puedes visitar el santuario y los sepulcros donde descansan los cuerpos de muchos papas. Al caer la tarde, la Plaza de San Pedro es el lugar idóneo para descansar tras la visita y contemplar lo que es capaz de levantar el ser humano.
Plaza de España
Tanto por el día como por la noche, esta plaza es uno de los lugares imprescindibles de Roma
Uno de los lugares más bulliciosos
En realidad, la Piazza de Spagna debe su popularidad a la enorme escalinata que la antecede. Esta escalinata se ha convertido en un agradable y heterogéneo punto de encuentro para la gente de Roma y para los turistas. Se llama Plaza de Spagna porque aquí está ubicada la sede española. Después de recorrer los 135 escalones llegarás a la iglesia de la Trinitá dei Monti. Si bien no es especialmente popular por su interior sí lo es por las vistas que posee de la ciudad. Es habitual encontrar turistas haciéndose fotos para inmortalizar la visita a la Ciudad Eterna. Desde aquí también divisarás al final de la escalinata la Fontana della Barcaccia, una enorme fuente con forma de barco, construida en el siglo XVII por Bernini para el papa Urbano III. Cuenta la historia popular que tanto la escalinata como la fuente se levantaron para que el papado viera una Roma más monumental y sofisticada. Por el día, es el punto de partida para la ruta de tiendas. Y por la noche también es un importante punto de encuentro. Tanto la popular escalera como la plaza se llena de jóvenes universitarios que se reúnen para comenzar la ruta nocturna.
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