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Guía turística: qué hacer y ver en Santiago de Compostela
El fin del Camino
Dicen que la ciudad no es la misma sin lluvia repicando en sus soportales. Santiago de Compostela podría describirse como el principio del fin; el destino del Camino de Santiago y una capital, por tanto, de peregrinos, muy amable cuando se trata de recibir a visitantes y también a los miles de estudiantes que cada año la eligen como ciudad universitaria. Quizá ésa sea la razón de tanta vida que se respira por sus esquinas y del buen ambiente nocturno del que presume orgullosa. La noche más famosa es aquélla en la que se celebra a Santiago Apóstol con un espectáculo pirotécnico sobre la fachada de su Catedral, que te dejará sin respiración cualquier día del año; una catedral que vigila la majestuosa Plaza del Obradoiro, el Palacio de Raxoi o el Hostal de los Reyes Católicos y que se asoma al conjunto del casco histórico declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Y ojo, que te vigilará también si recorres su famosísima Rúa do Franco y has tomado unas ricas 'cuncas' de Ribeiro o Albariño.
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Pastelería Mercedes Mora
Donde la tradición enlaza a la perfección con la modernidad. Un delicioso placer.
Dulces gourmet para golosos
Otra de las pastelerías míticas de la ciudad que hay que visitar en algún momento, bien para probar sus exquisitos productos, bien para llevar algún dulce de recuerdo. La pastelería Mercedes Mora es una de las más antiguas de Santiago, con todo lo que ello conlleva: tradición, buen hacer y unos productos de primerísima calidad. Está ubicada en la céntrica calle Villar. Prepárate para disfrutar con sus brazos de gitano, sus tartas, sus merengues, sus bizcochos rellenos o sus famosísimos bombones, una variedad casi infinita; y puedes comprar para llevar o también disfrutar de sus dulces en el mismo establecimiento, ya que cuentan con una cafetería interior donde sirven chocolate caliente y diferentes tipos de café. Desde su reapertura en el año 2007 también han incorporado a sus mostradores nuevas recetas, combinando las de toda la vida con otras más modernas para lograr un resultado sublime. ¿Una recomendación? Pide sus bagoas de Compostela, un dulce de yema y nuez que desearás volver a probar. ¿Qué apuestas?
Plaza Roja
Comercios, terrazas y eventuales mercados temáticos. ¡Muy buen ambiente!
Epicentro compostelano.
Durante la transición a la democracia, tuvieron lugar en esta plaza numerosas manifestaciones de personas con ideología de izquierdas; de 'rojos', por eso su nombre: Plaza Roja. Es el centro neurálgico de la zona nueva de Santiago, del ensanche, uno de los lugares preferidos por los vecinos para descansar cuando hace buen tiempo, para tomar un aperitivo en alguna de sus terrazas al aire libre o para salir de compras. Y no es para menos, ya que en este punto confluyen varias avenidas importantes de la ciudad, como las calles Fray Rosendo Salvado, la Cuesta de la Camelia o San Pedro de Mezonzo. Esta plaza, además de comercios de moda y entidades bancarias, acoge diversas actividades culturales y mercados temáticos; no es raro encontrar aquí algún fin de semana puestos de ropa o de comida. Siempre suele haber un buen ambiente y gente joven.
Cuesta de la Camelia
Zona comercial muy concurrida en la parte nueva de Santiago.
¡Por todos conocida!
Se trata de una calle del ensanche de la ciudad, muy conocida entre los compostelanos por albergar una gran cantidad de comercios de todo tipo. Su carácter empinado le otorga una singularidad especial, al igual que su franja central, compuesta por diversas fuentes que crean una lograda simulación de un río que desemboca en la Plaza Roja, otro punto muy concurrido. Es el centro neurálgico de la zona nueva de la capital. Esta cuesta es peatonal y fue renovada no hace mucho, una característica que facilita el recorrido por los establecimientos. Lo mejor de todo lo encontrarás al final de la cuesta, dos de las librerías más conocidas de la capital: Abraxas y Follas Novas, en las que los amantes de la lectura podrán dejar volar su imaginación y encontrar todo tipo de literatura. Tanto la Cuesta de la Camelia como la Plaza Roja conforman una de las zonas comerciales preferidas por los vecinos de Santiago.
Casa Rabeada
¿Estás pensando en comprar artesanías y no te decides? Éste es tu sitio.
Todo tipo de artesanías
Siguiendo con productos de artesanía, Casa Rabeada es otro de los puntos álgidos de este ámbito en Santiago de Compostela. Este establecimiento no se centra únicamente en un producto, sino que te sorprenderá la diversidad existente; tanto, que incluso te costará decidir qué llevar finalmente. Ubicado en el casco viejo, podríamos definirlo como una especie de bazar que vende cualquier tipo de artesanía realizada en Galicia, amén de otros artículos: cestas y bolsos de mimbre elaborados en la región, platos de madera para el pulpo, diversos tipos de muebles, cubos de hojalata o, incluso, instrumentos musicales como panderetas. Lo reconocerás fácilmente porque en la entrada tiene bolsos colgando de la puerta y seguramente también algún que otro mueble. Casa Rabeada ofrece productos orientados a cualquier bolsillo, ya que su amplia variedad te permitirá elegir aquél que mejor se ajuste a tus necesidades económicas.
Sargadelos
Obras muy bien trabajadas, rematadas a mano y con diseños realmente originales.
El universo de la cerámica
Seguro que alguna vez has escuchado hablar sobre la cerámica de Sargadelos, uno de los productos artesanos más famosos de toda Galicia. Y no es para menos, ya que las creaciones que tienen su sello destacan por un trabajo personalizado, hasta el punto de que todas las vajillas, joyas y figuras de porcelana están rematadas a mano. La cerámica de Sargadelos tiene un diseño singular, propio, heredado de la cultura tradicional de la región y perfectamente plasmado en cada obra de arte. Fue Antonio Raimundo Ibáñez quien creó la primera fábrica Sargadelos a comienzos del siglo XIX, pero la galería de este local no se abrió hasta el año 1978; desde entonces, además de la venta de artesanía, se organizan aquí eventos culturales y exposiciones de diversa índole. Si quieres sorprender a amigos o familiares con un regalo original, no busques más: esta cerámica reúne todo lo que buscas.
Pastelería La Perla
¿Qué tal una tarta o unas pedras de Santiago para endulzar el día?
¡Se te hará la boca agua!
Y, claro está, sería delito abandonar Santiago sin saborear algunos de los dulces más tradicionales, toda una experiencia para tu paladar. ¿Una recomendación muy golosa? En la Pastelería La Perla se te hará la boca agua incluso antes de entrar, ya su escaparate es toda una declaración de intenciones en el que se exponen manjares de ensueño. Su nombre no es ninguna casualidad: aquí se venden auténticas joyas y diamantes comestibles, piedras preciosas de la repostería. El postre más típico de la capital gallega es la famosa Tarta de Santiago, una creación elaborada con almendras, huevo y azúcar que cautivará incluso a los gustos más exigentes, y es posible que en esta confitería vendan las mejores de toda la ciudad. Créenos, acabarás llevándote una (por lo menos) para seguir disfrutándola en casa. Muy conocidas con también las pedras de Santiago, unos bombones de chocolate y almendra preparados bajo receta tradicional.
Mercadillo de antigüedades
Las antigüedades cobran protagonismo en el centro los fines de semana.
¿Te gustan las reliquias?
Sin duda, una de las citas más interesantes de la capital gallega durante el fin de semana. Este célebre mercadillo de antigüedades se monta en las calles del centro y, a pesar de que no es muy grande, pues sólo cuenta con unos cuantos puestos, se erige como una de esas imágenes que seguro te llevarás en el recuerdo. Tiene un encanto especial al estar situado en los claustros de las principales calles del casco histórico, y es que se trata del lugar idóneo para comprar verdaderas reliquias; aquí encontrarás cualquier cosa que llegues a imaginar: míticas cintas de cassette, libros antiguos (seguro que te topas con algún clásico de tu agrado), monedas de todas partes del mundo, muñecos y multitud de objetos que te harán recordar tu más tierna infancia. Son verdaderos tesoros del recuerdo. El ambiente es inmejorable, pues vecinos y visitantes se entremezclan en este evento ineludible en la búsqueda de esa preciada antigualla que les hará sonreír y rememorar otros tiempos. ¡No te lo puedes perder!
A Reixa Tenda
Discos, libros y ropa ambientada en la cultura londinense de los años 60 y 70.
¡Atención, sixties!
Si eres un amante de la moda y la cultura vintage, estás de suerte: A Reixa será tu mejor opción en Santiago; esta tienda, conocida incluso más allá de la capital, es un auténtico homenaje a la ecléctica cultura londinense de los años 60 y 70, pareciera como si al cruzar su puerta te hubieras transportado varias décadas en el tiempo. Es un pequeño establecimiento que funciona desde el año 2005, ubicado en el casco histórico, y que cuenta con numerosas opciones en lo que a camisetas, libros, cómics, pósters y discos se refiere: los fans de Bowie, los Beatles, Janis Joplin o The Kinks llegaron a su santuario particular. También aquí encontrarás moda masculina de marcas como Fred Perry, Merc o Ben Sherman y un apartado de complementos con bolsos, gorras o zapatillas. Como curiosidad, no te extrañes si alguna vez hay un dj pinchando música o una banda tocando en vivo: es otra de las sopresas que A Reixa tiene guardadas especialmente para ti.
Rúa Nova
Buena opción para llevarte algún recuerdo de tu paso por Santiago.
De las más concurridas del centro
Llegamos a una de las calles más importantes y concurridas del centro histórico de Santiago, célebre por albergar algún edificio emblemático del casco antiguo y tiendas muy conocidas no sólo por los vecinos, también por los turistas. Unida a la Calle do Vilar por el callejón de Entrerrúas, la calle más estrecha de la ciudad, aquí encontrarás establecimientos de todo tipo, desde tiendas de tatuajes hasta locales de ropa con buena parte del género en la propia calle; seguro que te llamarán mucho la atención. Es también una de las mejores opciones para comprar el típico recuerdo de tu visita, pues en la Rúa Nova se localiza la tienda de Sargadelos, esta famosa porcelana de Galicia, o la Librería Vetusta, con infinidad de posibilidades para los amantes de la lectura, ya que son libros de segunda mano. Paseando por ella te toparás con la iglesia de Santa María de Salomé y también con edificios de carácter cultural como el Teatro Principal o el Salón de Teatro.
Mercado de Abastos
¡Hay puestos que cocinan tu compra sobre la marcha! ¿No es genial?
Una experiencia para tus sentidos
Más que centenario, abierto desde el año 1873, este mercado ha visto pasar a generaciones y generaciones de gallegos ofreciendo los mejores productos de la tierra. No en vano, se alza orgulloso como uno de esos lugares capaces de despertar tus sentidos hasta elevarlos a la enésima potencia. En el Mercado de Abastos encontrarás alimentos de primerísima calidad, muy frescos, y muchos de los manjares gastronómicos de la región en sus numerosos puestos de carnes, mariscos, quesos, pescados y verduras. Tiene algunas peculiaridades, como una máquina de leche fresca del día o la posibilidad de efectuar pedidos por Internet. ¿Lo mejor? Que hay puestos que te preparan allí mismo los productos que has comprado y tendrás la oportunidad de saborearlos sobre la marcha. ¿No es maravilloso? Hablamos de uno de esos puntos de visita obligada, de los que no puedes perderte durante tu visita a Santiago. Por algo es el segundo lugar más visitado de la ciudad, únicamente superado por la catedral.
Museo de Arte Sacro
Impresionantes reliquias de hace cientos de años. Sencillamente espectacular.
Piezas religiosas de gran valor
En este centro, que seas o no creyente es lo de menos; lo importante son sus fondos. Ubicado en uno de los laterales de la Plaza de Quintana, el antiguo Monasterio de San Pelayo, de estilo barroco, es el bello edificio que alberga el Museo de Arte Sacro de la capital gallega. Está en pleno centro de la ciudad. La colección de arte que se exhibe en su interior es poco menos que espectacular, con riquezas de un valor incalculable que tienen cientos de años. Su diversidad es más que notable: pinturas, documentos, restos arqueológicos, ornamentos, esculturas, orfebrerías y un sinfín de reliquias que te dejarán con la boca abierta. Destacan especialmente una figura de Cristo datada del siglo XIII, el altar que acompañó en su época al féretro del apóstol Santiago y una edición de la Regla de San Benito del año 1610, ejemplar único y realmente valioso. Para acceder al museo es necesario pasar por la iglesia, en la vía Sacra. ¡No te defraudará!
Museo etnográfico Sotelo Blanco
De especial interés resulta el apartado dedicado a la emigración gallega.
Carácter cien por cien gallego.
Un paso más en la consideración de la cultura gallega. En esta ocasión, y a diferencia de lo que pudimos ver en el Museo del Pueblo Gallego, se ofrece especial atención a las costumbres del interior de la región y a los oficios que aún se siguen desarrollando en ciertas zonas: aquí encontrarás objetos utilizados por herreros, canteros o curtidores para su trabajo cotidiano, al igual que diferentes herramientas de labranza traídas de comarcas montañosas. Especial mención merece la parte dedicada a la emigración gallega del siglo pasado, especialmente a países latinoamericanos, un hecho fundamental de su historia y que ha marcado desde entonces el carácter de todo un pueblo. El centro cuenta con dos salas de exposiciones permanentes y otra en la que se proyectan exhibiciones de carácter temporal. Ubicado en la sede de la Fundación Sotelo Blanco, lo encontrarás en la carretera que lleva al aeropuerto de la ciudad.
Colección del colegio médico
Visita muy enfocada a profesionales médicos, realmente curiosa.
Para apasionados en la materia
De acuerdo, quizá su carácter pormenorizado no la convierta en una de esas visitas destinadas a todas las personas que llegan a Santiago, pero sí puede resultar muy interesante para los expertos en la materia. El Colegio Médico de la capital gallega, ubicado en la Facultad de Medicina, acoge esta curiosa colección de material usado durante las últimas décadas a la hora de efectuar la anestesia a los pacientes, instrumentales ya concebidos como auténticas joyas de la medicina, convertidos en verdaderas reliquias. La mayor parte del material fue donado por los mejores médicos locales. Además, y a modo explicativo, cuenta también con algunos grabados que muestran cómo se desarrollaban antiguamente estas técnicas, de modo que los interesados pueden rememorar la práctica. La entrada es gratuita, con visitas de lunes a viernes. Durante el mes de agosto la colección está cerrada.
Museo de Historia Natural Luis Iglesias
25.000 ejemplares repartidos en tres secciones: geología, botánica y zoología.
Para entusiastas de la naturaleza
¡Atención, amantes de la naturaleza! ¡Este centro no os lo podéis perder! El Museo de Historia Natural Luis Iglesias, perteneciente a la Universidad de Santiago, os permitirá disfrutar de una espectacular colección compuesta por alrededor de 25.000 ejemplares de flora y fauna de Galicia y de otras partes del planeta. Esta gran muestra se encuentra dividida en tres secciones diferenciadas: geología, botánica (con un herbario pedagógico creado por Baltasar Merino) y zoología, que ocupa tres salas; una de ellas está dedicada a la fauna exótica, otra se utiliza para explicar la fauna de Galicia y la última está especializada en fauna europea. Además, se trata de un centro orientado al estudio y la difusión del medio ambiente, resultando muy interesante ver de cerca la labor de destacados científicos gallegos como Isidro Parga o José Rodríguez. Podrás visitarlo en la Facultad de Ciencias Químicas, y la entrada es totalmente gratuita el primer miércoles de cada mes.
Museo del Pueblo Gallego
Un completo recorrido por las tradiciones y la idiosincrasia de la región.
Profundas raíces culturales
No encontrarás una mejor oportunidad para sumergirte en lo más profundo de la cultura y la idiosincrasia típicamente gallega, un centro etnológico en toda regla. El célebre Museo del Pueblo cuenta con exposiciones permanentes de arqueología, escultura y pintura de la región, al tiempo que alberga otras salas donde se exhiben diversos objetos relacionados con el trabajo del campo, la indumentaria popular, elementos del oficio marinero y otros oficios tradicionales que se han ejercido en Galicia durante décadas. También dispone de una sala permanente con una notable sección de música. Es, por tanto, la forma más práctica de conocer cómo han vivido tradicionalmente los vecinos de la tierra y cuáles son sus costumbres más arraigadas. Este centro se inauguró en los años 70, y desde entonces se ha convertido en uno de los más queridos por los compostelanos. Se ubica en el antiguo convento de Santo Domingo de Bonaval, pudiendo ser visitado cualquier día de la semana excepto los lunes.
Museo de las peregrinaciones (Casa Gótica)
Exhibe fondos arqueológicos que se encontraron en la catedral en el siglo XX.
Un centro con verdadera historia
Si hablamos de valor histórico, quizá sea éste museo el que se lleve la palma en Santiago. A unos metros de la Plaza del Obradoiro, el Museo de las Peregrinaciones acoge una impresionante colección de fondos artísticos y arqueológicos encontrados en la catedral durante el siglo XX, así como otros importantes bienes que se conservaban guardados en sus sótanos. El alma del centro radica en plantear un recorrido con las diferentes peregrinaciones religiosas que se llevan a cabo en el mundo, con una atención especial, claro está, al Camino de Santiago y a la Ruta Xacobea: es el lugar ideal para conocer sus profundas raíces y qué es lo que mueve a miles de peregrinos a realizar cada año esta aventura inolvidable. Está ubicado en el antiguo edificio del Banco de España gracias a la intensa remodelación que llevó a cabo Manuel Gallego Jorreto, una eminencia gallega de la arquitectura actual. Abarca una superficie de 3.500 metros cuadrados.
Museo Fundación Eugenio Granell
Aquí podrás ver muchas de sus obras y curiosos objetos personales.
Genial artista todoterreno
Eugenio Fernández Granell se ha convertido con el paso de los años en una de las figuras culturales más relevantes del siglo XX gallego, un artista polifacético que abrazó disciplinas tan dispares como la escritura, la poesía o la pintura. Aunque nació en A Coruña, pasó su infancia en Santiago, ciudad que marcó notablemente su obra; tanto, que fue nombrado hijo adoptivo de la ciudad en el año 1997. Granell fue un pintor surrealista que llegó a codearse con genios como Bretón y Duchamp, y esta fundación se encarga de difundir su obra: aquí es posible disfrutar de algunos de sus óleos, dibujos y esculturas, así como la de otros compañeros suyos como Copley, Miró o Lam. También podrás contemplar numerosos objetos que fue coleccionando durante su estancia en Latinoamérica y Estados Unidos, y, en ocasiones, se programan conciertos de cámara y actuaciones teatrales. La sede del museo es el Pazo de Bendaña, un bello edificio del siglo XVIII.
Centro Gallego de Arte Contemporáneo (CGAC)
Exposiciones, talleres, seminarios, ciclos de cine... ¿Quién da más?
El contrapunto artístico moderno
Este centro fue fundado en el año 1993 con el objetivo de promover las mejores opciones del panorama artístico actual, con énfasis especial en las creaciones contemporáneas. Aparecía así la oportunidad de difundir otros modelos diferentes, ampliando notablemente el abanico cultural de la capital. El Centro Gallego de Arte Contemporáneo se ha convertido en todo un referente al haber desarrollado retrospectivas y revisiones de las obras de artistas tan destacados como Giovanni Anselmo, Medardo Rosso o Ana Mendieta; también ha abordado la vida y obras de los mayores representantes de la cultura gallega de las últimas décadas, como Laxeiro, Maruja Mallo o Rafael Baixeras. El edificio en sí fue proyectado por el arquitecto portugués Álvaro Siza, quien plasmó su gusto por los racionalismos y el movimiento moderno. Además de exposiciones, el CGAC ofrece también interesante talleres, ciclos de cine, seminarios y espacios de proyectos con artistas.
Museo Centro Gaiás
Alberga algunas de las exposiciones más interesantes de la ciudad.
Opciones culturales de vanguardia
Se trata de uno de los peculiares edificios que conforman la Ciudad de la Cultura de Santiago, un extraordinario paisaje arquitectónico que representa a la perfección la modernidad capitalina. El Museo Centro Gaiás destaca fundamentalmente por dos aspectos: de un lado, porque alberga una espectacular fachada curvilínea de 43 metros de altura que no te dejará indiferente, seguro que es capaz de romper tus esquemas; de otro, porque es la sede de interesantísimas exposiciones temporales de carácter nacional e internacional a lo largo de sus tres plantas y sus casi siete mil metros cuadrados. Además de estas exhibiciones de vanguardia, también ofrece actividades formativas, cuenta con amplios espacios de co-work y, en ocasiones, se encarga de programar en su exterior conciertos de estilos tan diferentes como hip hop, folk o música clásica. Como dato importante, la entrada es gratuita los miércoles, así que... ¡aprovéchalo!
Casa de la Troya
Recreación de la pensión de estudiantes de la novel 'La Casa de Troya'.
Hablemos de Doña Generosa Carollo
Atento, porque aquí vas a conocer a Doña Generosa Carollo, una señora que vivió a finales del siglo XIX y que se encargaba de gestionar una famosa pensión de estudiantes. Así lo inmortalizó el escritor Alejandro Pérez en su novela 'La Casa de Troya'. Este museo es una recreación perfecta de aquel ambiente, una casa que reproduce la pensión a imagen y semejanza de la que aparece en la historia, con todo lujo de detalles en sus diferentes estancias: el comedor, muebles y utensilios en la cocina, los dormitorios, la habitación de la patrona y un sinfín de objetos y fotografías relacionadas con los protagonistas de la novela que no te dejarán indiferente. También han sabido recrear el ambiente hogareño de la época. Cuenta con tres plantas y un ático, y se puede visitar de martes a domingo. Existe la posibilidad de realizar visitas en grupo.
Camino de Santiago
Una experiencia única que cambiará para siempre tu forma de ver la vida.
El camino más famoso del mundo
Quizá el Camino de Santiago sea el apartado que menos explicaciones requiera de toda Galicia, pues seguro que más de una vez has escuchado hablar sobre esta peregrinación. Su historia se narra desde siglos atrás, y está repleta de fantasía, leyendas y de un afán de superación que ha llegado a superar incluso al ámbito religioso, razón por la que nació, para alcanzar motivos personales y espirituales. La recompensa de esta inigualable aventura no estriba únicamente en venerar al apóstol Santiago en la catedral, que también, sino en encontrar un camino interior que, seguro, cambiará tu forma de ver la vida. Es una experiencia única. Las rutas hasta Santiago se pueden iniciar en numerosos puntos de España y de Europa para luego entroncar juntas hasta la capital gallega; es especialmente recomendable hacerlo en Año Xacobeo, que es cuando el 25 de julio, la festividad del patrón, se celebra en domingo.
Torres Hejduk
Dos torres vanguardistas que rompen con la arquitectura antigua de Santiago.
Nuevos aires arquitectónicos
Por supuesto, al igual que ocurría con la gastronomía contemporánea, también hay espacio en Santiago para la arquitectura de corte vanguardista en contraste con todos los edificios históricos que se reparten por la ciudad. Las Torres Hedjuk, llamadas así por ser un diseño del arquitecto neoyorquino John Hejduk, conforman uno de los elementos más llamativos de la reciente Ciudad de la Cultura de la capital gallega. Hejduk diseñó estas torres para el parque Belvís, pero murió en el año 2002 y no pudo completar su proyecto; sin embargo, su amigo y también arquitecto Peter Eisenman las incluyó en el complejo Gaiás, que es donde se ubican actualmente. Son dos prismas simétricos de veinte metros de altura que van reduciendo su cuerpo conforme crecen, y ofrecen un contraste notable: una de las torres está revestida exteriormente con piedra; la otra, con vidrio. Es una puerta a la cara moderna de Santiago.
Plaza de Fonseca
Es una de esas plazas que nunca duermen, con gran ambiente nocturno.
Abierta las 24 horas del día.
Con una pequeña fuente de cantería en el centro, se trata de un foro muy querido por los vecinos de Santiago, por los estudiantes universitarios y también por los peregrinos que llegan a la ciudad tras su largo camino. La Plaza de Fonseca está ubicada en pleno casco histórico, muy cerca de la catedral, y, al ser abierta, conecta con algunas de las calles más importantes del centro. Cuenta también con una cuidada vegetación que llena de encanto el lugar. Eso sí, lo mejor es cuando llega el buen tiempo y comienzan a colocarse alrededor de la fuente las terrazas de los distintos bares, que la hacen aún más agradable: siempre se ha dicho que las noches aquí son diferentes y nunca defraudan, el ambiente es de primera. Es una de las zonas más concurridas durante la época estival. Y si estás recorriendo los edificios emblemáticos del centro, no encontrarás mejor lugar para descansar un poco y recuperar fuerzas tras las visitas.
Parque de Bonaval
Zona verde de más de 37 km², el lugar ideal para disfrutar de un buen paseo.
Un gran pulmón capitalino
Su nombre completo es Parque de Santo Domingo de Bonaval, pero todos los vecinos lo conocen simplemente como 'Parque de Bonaval'. Hablamos de una enorme zona verde ubicada en la parte posterior del Convento de Santo Domingo, de ahí el nombre, que alberga también otros centros importantes de la capital como el Centro Gallego de Arte Contemporáneo y el Museo del Pueblo Gallego. Fue diseñado por el arquitecto portugués Álvaro Siza y la paisajista Isabel Aguirre a lo largo de más de 37 kilómetros cuadrados, y se inauguró en julio de 1994: desde entonces se ha convertido en una de las zonas predilectas para los compostelanos para pasear y disfrutar de la tranquilidad que ofrece la naturaleza. Es especialmente llamativo ver la cantidad de gente que acude aquí los fines de semana. En su interior encontrarás también una escultura del artista Eduardo Chillida llamada 'A porta da música': sus dos columnas de acero miden más de tres metros de alto y pesan 17 toneladas.
Mirador de la Herradura
No te lo puedes perder: es la postal compostelana por excelencia.
Las mejores vistas de la ciudad
Éste puede que se convierta en uno de tus rincones favoritos de Santiago, uno de esos lugares a los que acudes siempre que vuelves a visitar la ciudad para inmortalizar el momento. Y es que el Mirador de la Herradura ofrece las mejores panorámicas que podrás encontrar aquí, ya que permite contemplar desde lo alto los edificios más emblemáticos del casco viejo, con las torres de la catedral imponentes sobre todos ellos. Es una postal de enorme belleza que te dejará huella, seguro; no en vano, se trata de una de las imágenes más típicas de Santiago: la capital cuenta con otros cuantos miradores, pero éste es sin duda el más conocido de todos. ¿Cuándo venir? Te recomendamos que lo hagas al caer la tarde y en compañía de tu pareja, pues la puesta de sol consigue crear unos paisajes increíbles y realmente románticos. Está ubicado en el precioso Parque de la Alameda, casi a los pies de la colina de Santa Susana, por lo que llegar hasta este mirador no se te hará nada complicado.
Casa da Parra
Edificio construido en sillería de granito, gran ejemplo de arquitectura barroca.
Edificio histórico de gran belleza.
Se trata de uno de los edificios más emblemáticos del centro de Santiago, monumental construcción de estilo barroco creada a finales del siglo XVII por el arquitecto Domingo de Andrade, uno de los históricos gallegos. La Casa da Parra está situada en la céntrica Praza de Quintana, a unos pocos pasos de la catedral, y es fácilmente reconocible por estar construida en sillería de granito, piedra típicamente gallega, con cubierta de teja. A lo largo del siglo XX se llevaron a cabo diversas reformas para añadir el último piso y la preciosa balaustrada que corona la fachada, concediendo así al edificio una apariencia todavía más majestuosa. De su decoración sobresalen las ménsulas labradas del balcón y su célebre chimenea, uno de sus elementos más conocidos. En la actualidad, la Casa da Parra se dedica a albergar exposiciones de artistas primordialmente gallegos, y se puede visitar de martes a sábado.
La Fuente de los Deseos
Simbolismo y espiritualidad en un lugar muy especial para los peregrinos.
¿Quieres volver a Compostela?
En realidad... no es una fuente como seguramente te la esperes, sino más bien una especie de charca pequeña con una boca de metal escondida entre plantas. Eso sí, su encanto no lo podrás negar. Está ubicada en la esquina de un patio creado como depósito de mochilas, que se hizo expresamente para aquellos peregrinos que quisiesen visitar la catedral por dentro, pues al templo no se puede acceder con mochila. ¿Lo mejor del lugar? El simbolismo que alberga desde antaño y el halo espiritual que lo acompaña, sin duda. En la pared adyacente hay colocado un cartel que reza 'Si a Compostela quieres volver, de la fuente has de beber', así que no encontrarás una forma mejor para jurar amor eterno a esta preciosa ciudad. Y si crees en los deseos, lanza a la fuente la pertinente moneda y pide aquello que más deseas. Pero cuidado, porque se cumple, ¿eh?
Ruela de Entrerrúas
La calle más angosta de Santiago, no apta para cardiacos.
Claustrofóbica estrechez.
Acabas de llegar a la calle más estrecha de todo Santiago. ¿No lo crees? Entonces prueba a entrar en ella, verás qué impresión te llevas. La ruela de Entrerrúas es un callejón del centro histórico que se encarga de unir la calle Nova con la calle del Villar, siendo muy divertido recorrerla, eso sí, siempre que no sufras de claustrofobia: por ella sólo pueden pasar personas que vayan en el mismo sentido; si estando alguien dentro accede otra persona en sentido contrario, llegará un momento en el que nadie pueda seguir avanzando por falta de espacio. La sensación es extraña a la vez que peculiar, pues da la impresión de que las fachadas de los edificios ubicados a sus lados fueran a aplastarte. Esta ruela te sorprenderá también porque parece que no albergará nada en su interior, pero a uno de sus lados te toparás con un bello patio interior que alberga un bar, la escapatoria perfecta si te agobias demasiado dentro de la calle.
Árbol de la ciencia
No son pocos los vecinos que han elegido su profesión gracias a este árbol.
Una divertida leyenda.
El escritor español Pío Baroja publicó en el año 1911 la novela 'El árbol de la ciencia', que narra la vida de Andrés Hurtado, un estudiante de medicina desilusionado por la educación que recibe. Santiago también cuenta con su propio Árbol de la Ciencia, ubicado en un lateral del Pazo de San Xerome, al comienzo de la calle Franco, y mirando hacia la Catedral. Obviamente, no se trata de un arbol físico como tal, sino de un árbol plano de hierro del que cuelgan diversas ramificaciones ataviadas con nombres de carreras y oficios: astronomía, filosofía, ciencias, arte, biología, matemáticas... Como curiosidad, siempre se ha dicho que el joven estudiante que no sabe qué carrera desea realizar se coloca de espaldas al árbol y elige un papel al azar, señalando de espaldas con el dedo, y ésos serían sus estudios. Hablamos de uno de los puntos más visitados de la ciudad; tanto, que tuvo que ser cubierto con un cristal para ser preservado debidamente.
Plaza de Platerías
Todo un símbolo compostelano. Pequeña, pero encantadora.
Hervidero de turistas y peregrinos.
Sólo necesitarás asomarte a esta pequeña y coqueta plaza para darte cuenta de que vas a llegar a un lugar de gran relevancia histórica y con mucho encanto; una vez que entres en ella, comprobarás entonces que te encuentras en todo un símbolo de la ciudad. Ya en la Edad Media era una plaza muy transitada gracias a que en los soportales del claustro había talleres de plateros y orfebres, de ahí su nombre, Platerías. Su tradicional trasiego ha llegado hasta nuestros días, pues siempre está llena de vecinos, turistas o peregrinos que han finalizado el Camino de Santiago, creando un ambiente realmente especial que no te puedes perder. Uno de sus flancos es la fachada sur de la catedral, aquélla donde se ubica la Torre del Reloj o Torre de la Berenguela; de hecho, esta fachada también es conocida como 'de las Platerías'. En su centro podrás disfrutar de la conocida Fuente de los Caballos.
Casa Rosalía
No olvides pedir sus huevos con chanfaina, una receta muy especial.
¿Seguimos de tapas?
Otro célebre local en la calle Franco, que, como ya habrás podido comprobar, es la arteria culinaria por excelencia en la ciudad. Casa Rosalía destaca por ofrecer vinos y tapas exquisitas, caseras, castizas, que combinan a la perfección con lo antiguo y encantador de su edificio. Este local es perfecto tanto si quieres tomar un aperitivo de media mañana como si ya deseas sentarte a comer, pues hay opciones para todos los gustos: una buena variedad de pinchos para abrir boca, pulpo a la gallega, empanada, calamares, ensaladas, mejillones y diversas recetas típicas de la tierra. Pero quizá uno de sus platos estrella sean los huevos con chanfaina, una receta caldosa con carne como ingrediente básico y a la que luego se añaden otros ingredientes que van variando, como huevo, pimientos o arroz. ¡Es exquisita! El servicio de Casa Rosalía te hará sentir como en casa.
O Gato Negro
Cuenta la leyenda (y los clientes) que aquí se sirve el mejor pulpo del mundo.
¡Siempre está lleno!
Atención, amantes de los bares de toda la vida: habéis llegado al lugar indicado. O Gato Negro podría definirse como el alma gastronómica de Santiago, un local mítico con una larga barra metálica que no puedes dejar de visitar; irte de la capital gallega sin probar las raciones de este local es poco menos que un pecado. El bar es muy fácil de reconocer gracias a su ventana verde, su llamativa puerta y el gato negro que descansa sobre ella desde hace años. Aquí no busques una decoración minimalista ni creaciones de diseño, lo que importa realmente es la comida: no en vano, son muchos los que dicen que en este local han probado el mejor pulpo del mundo, así que tendrás la oportunidad de corroborar las opiniones. Además, también ofrecen otras recetas tradicionales como berberechos, empanada gallega, mejillones o pimientos de Padrón. El precio medio ronda los 20 €, una auténtica ganga si tienes en cuenta el excelso sabor de sus platos. ¿Preparado para disfrutar?
Restaurante O'42
Excelentes raciones de pescado y marisco a muy buen precio.
Un verdadero must gastronomíco
Otro clásico compostelano, uno de esos locales que conoce cualquier vecino al que le preguntes. El O'42 fue en un su día una amena taberna, siempre muy concurrida, pero, debido a su gran acogida, los dueños decidieron que debían dar un paso más allá y crear un restaurante. Esto tuvo lugar en la década de los 70, y hasta ahora no ha perdido ni un ápice de su esencia. Aquí podrás encontrar lo mejor de la gastronomía tradicional gallega, como la célebre empanada, chipirones, zamburiñas, pulpo o arroces de todo tipo; además, también cuentas con la opción de tomar unos pinchos y así probar más variedad de sabores o elegir entre varios menús, con precios que oscilan entre 25 y 35 €, con una acertada selección de entrantes y platos principales. Su carta de vinos no se queda atrás, extensa y con opciones extraordinarias. ¿Llegó la hora del postre? Entonces no te pierdas su tarta de queso con confitura de arándanos, sencillamente espectacular
El Pasaje
Manjares gallegos, buenos vinos y una materia prima de lujo. ¡Apuesta segura!
Gastronomía selecta
Quizá el mejor momento para acudir a este establecimiento sea por la tarde-noche, en ese instante en el que tu apetito comienza a hacerse sentir tras un agradable paseo por el centro de la ciudad. Es un restaurante emblemático de la zona vieja de Santiago. El Pasaje cuenta con una más que atractiva bodega, lo que le convierte en una opción ideal para saborear un buen caldo de la tierra mientras los acompañas de sus platos tradicionales. De acuerdo, digamos que no es un restaurante económico, pero siempre merece la pena visitarlo para dar una alegría a tu paladar. ¿O acaso unas vacaciones no son la ocasión ideal para darse un merecido homenaje? De su carta destaca sobre todo el marisco, donde encontrarás excelentes mejillones, vieiras de la casa, bueyes de mar, navajas, ostras y otras recetas más elaboradas como sus célebres espaguetis a la sepia negra, arroces marineros o el guiso de rabo de toro. Pidas lo que pidas, puedes quedarte tranquilo: acertarás.
Restaurante Ó Dezaseis
Local peculiar con una cocina de diez, muy tradicional. Ofrecen menú del día.
¡Mmmm! ¡Para chuparte los dedos!
Este restaurante es de los más peculiares que vas a encontrar en Santiago, característico por su techo que emula a unos viñedos y por sus toscas paredes de piedra que te ubican en un auténtico caserío. O Dezaseis es el lugar ideal si lo que quieres es quedarte satisfecho, ya que la relación calidad-precio es excelente: sus exquisitos pescados tienen un precio medio de 13€, las carnes suelen costar alrededor de unos 14€ y, si lo que deseas es picar algo para probar diferentes productos, sus raciones cuestan entre 5 y 14€, con una gran variedad donde elegir: el célebre lacón gallego (carne rosada proveniente de la pierna del cerdo), berenjenas rellenas, salpicón de rape, empanadas o revueltos de langostinos son siempre apuestas seguras. También, si lo prefieres, cuenta con opción de menú del día. ¿Una recomendación personal? No olvides dejar un poco de hueco para los postres, porque... ¡te chuparás los dedos!
Restaurante Don Gaiferos
Tres adjetivos lo definen: sencillo, informal y, a su vez, elegante.
Histórico local e histórico nombre
El nombre de este famoso restaurante viene de lejos, y se lo debe a Don Guillermo X de Aquitania, un peregrino que murió a mediados del siglo XII en la catedral de Santiago mientras se celebraba el Viernes Santo. Dadas las creencias religiosas de la época, muchos pensaron que fue un milagro fallecer en la catedral y en una fecha tan señalada; a partir de entonces se le conoció como Don Gaiferos de Mormaltán. El restaurante en sí es un local informal, sencillo, pero con una base de elegancia que no se puede obviar. Nació en la década de los 70, y desde entonces se ha convertido en uno de los clásicos de la capital gallega. Su menú es de corte tradicional, con recetas sencillamente exquisitas: mejillones en escabeche, solomillo de ternera, pulpo á feira o croquetas de marisco y pescado, combinando la cocina gallega con otros platos más internacionales. Su materia prima es excelente, así como su amplia carta de vinos con denominación de origen Bierzo, Toro o Rioja. Está ubicado en pleno casco viejo.
Casa Marcelo
Propuesta diferente, perfecta para ocasiones especiales. ¡Te sorprenderá!
Cocina japo-gallega.
Cuando hablamos de comida fusión en Santiago, hacer referencia a Casa Marcelo es una cuestión ineludible. Se trata de un restaurante de estilo contemporáneo que mezcla a la perfección la comida japonesa con la gastronomía casera gallega, sacando el máximo partido a las dos. Se convierte en el restaurante ideal para una de esas cenas especiales, ya sea una cita romántica o un encuentro de negocios: ya sabes que una de las maneras de conquistar a alguien es a través del estómago. El concepto es diferente, quizá nunca llegaste a imaginarlo: sushi elaborado con el mejor pescado gallego, nigiri de mero, gilda de merluza de celeiro o, su plato estrella, shao mae de conejo guisado. Ahí es nada. Casa Marcelo es un lugar refinado, de lo más acogedor, que te ofrece incluso la oportunidad de comer frente a los cocineros para ir aprendiendo algunas nociones de la cocina japo-gallega.
A Colleita
Cocina innovadora que se refleja en sus tapas de corte vanguardista.
Restaurante de diseño.
Y claro, no todo en la capital gallega iban a ser restaurantes tradicionales, también hay cabida para locales de diseño que trabajan para sorprenderte con cada bocado. A Colleita es un buen ejemplo de la cocina gallega moderna, un local de vanguardia que ha sabido ganarse a su fiel clientela con verdaderas obras de arte comestibles. Está ubicado en el barrio del Conxo. Una de sus peculiaridades estriba en dar valor a los alimentos locales al ofrecer en su carta productos gallegos con denominación de origen, algo que demuestra su apuesta por la calidad. Aquí tendrás la oportunidad de saborear un buen queso y maridarlo con algún caldo de su interesante carta de vinos, que no te puedes perder. Es un lugar ideal para comenzar tu ruta de pinchos. También, para los menos aventureros, ofrecen recetas de toda la vida, como patatas bravas.
A Barrola
Restaurante idóneo para degustar una excelente mariscada.
Exquisito pescado fresco.
Hablamos de un grupo de dos restaurantes muy famosos que se encuentran situados en el casco viejo de Santiago: A Barrola y Casa Elisa. El que hemos seleccionado, A Barrola, es característico por su fachada de piedra flanqueada por dos escaparates con excelente pescado fresco. Ya se te hace la boca agua incluso antes de entrar. En su interior encontraremos un restaurante de corte clásico, con una decoración muy acertada y con un servicio de primera. ¿Qué puedes comer aquí? La tradicional empanada gallega, espárragos de Tudela, pulpo, calamares de la ría o el rico caldo gallego, ideal para entonar el cuerpo. A Barrola es también un lugar idóneo para deleitarse con una buena mariscada, la verdadera joya en tierras gallegas: zamburiñas, cigalas, langostinos, nécoras, vieiras o langostas, además de pescados frescos de la ría y una extensísima carta en la que también encontrarás carnes o huevos revueltos.
Taberna do Bispo
Su pincho de gambas con pimiento de Padrón es espectacular. ¡Descúbrelo!
Ya va entrando hambre, ¿verdad?
Atento, porque llegamos a uno de los templos de la gastronomía compostelana, un lugar donde se practica a la perfección la cultura de barra y, especialmente, la cultura de la tapa. Prepárate para disfrutar, porque las opciones son casi infinitas: navajas, mejillones, almejas, pinchos de gambas con pimiento de Padrón (su gran especialidad), tortilla de patatas, brochetas de ternera, choricitos al vino, rabas, paella... Como ves, opciones no te van a faltar; tampoco se quedan cortos a la hora de presentar sus delicias culinarias, seguro que te sorprenderán. La Taberna do Bispo es un local sencillo, cómodo y muy céntrico, al lado de la Universidad de Santiago. Quizá no sea el más económico para disfrutar de unas buenas tapas en la ciudad, pero ten por seguro que nunca defrauda: la relación calidad-precio es excelente. ¡A tapear!
Bucear en Galicia
La costa gallega ofrece interesantes opciones a los amantes de este deporte.
¿Un paseo bajo el mar?
La costa gallega es una de las más ricas de España no sólo en lo que a materia prima se refiere, también por su belleza submarina. ¿Te gusta bucear o siempre has querido probarlo? ¿Estás preparado para hacer una excursión por el fondo del mar? Aquí tendrás una gran oportunidad para nadar entre peces y ver de cerca la flora más desconocida de la región. Una buena opción, por ejemplo es la escuela de buceo Mergullo Compostela, ubicada en Porto do Son, a una hora de Santiago: todos los fines de semana del año organizan salidas submarinas que te permitirán descubrir una naturaleza diferente y que te sorprenderá gratamente. Parten desde el muelle del municipio, y no te preocupes si nunca disfrutaste de una experiencia tan fantástica como ésta, pues ofertan inmersiones para todos los niveles, también cursos de iniciación. ¡A bucear!
Tren turístico
Una forma diferente de conocer el casco histórico de la ciudad.
Para toda la familia
Sí, de acuerdo, lo más común cuando visitas una ciudad es conocer sus rincones paseando, a tu propio ritmo; sin embargo, Santiago de Compostela te ofrece una opción menos corriente, pero mucho más llamativa: su tren turístico. Puedes tomarlo en la Plaza del Obradoiro, desde donde parte para realizar un recorrido por los lugares más emblemáticos del centro histórico en un trayecto de 45 minutos. Durante el paseo pasarás por la catedral y por otras zonas del casco viejo, descubriendo jardines de ensueño y teniendo la oportunidad de disfrutar de una zona panorámica con las mejores vistas de la ciudad. Su precio es realmente asequible: 6€ los adultos y 4€ los niños de cuatro a doce años; una buena elección si viajas en familia acompañado de los más pequeños de la casa. Sus horarios varían según la época del año, por ello es recomendable acudir hasta la plaza para confirmar cuándo saldrá. En temporada alta, por ejemplo, ofrece servicio todos los días.
Queimada gallega
Bebida alcohólica gallega cargada de conjuros y rituales. ¡Pruébala y vívela!
Sapos e bruxas...
Hablamos de una bebida alcohólica que sólo podrás encontrar en Galicia, elaborada principalmente con aguardiente y azúcar, que es quemado a posteriori. Pero lo mejor de la queimada no es su particular sabor, que también, sino la forma de prepararla: según la tradición, debe hacerse a través de un ritual, pues siempre se ha dicho que protege de los maleficios y de los espíritus después de pronunciar un conjuro. En Santiago se celebran noches de queimada y música en directo, siempre con el conjuro incluido, claro. Lar das Meigas, por ejemplo, las organiza y las ameniza con música tradicional de la tierra: el precio del evento es de 10€. Además, este local también ofrece otros cursos temáticos relacionados con el vino, con la literatura o con la música. Pocas cosas encontrarás tan típicamente gallegas como la queimada, así que no te lo puedes perder; las noches de conjuro te están esperando.
Teatro Principal de Santiago
Cultura para todos los gustos, desde ciclos de cine hasta conciertos.
Una programación más que atractiva
Si eres un apasionado del teatro, éste sea quizá el mejor lugar de Santiago para ver una buena actuación sobre los escenarios. Su programación, en gallego y castellano, acoge también actuaciones musicales de diferentes estilos, desde clásica hasta folk; además, los domingos se celebran conciertos de la Banda Municipal de Música a las 12.30 horas. Uno de los eventos más reconocidos del Teatro Principal son los ciclos de cine internacional que tienen lugar una vez al mes, con una semana de duración, y que cuentan con una gran acogida entre los vecinos. El más famoso de todos es el ciclo 'Cineuropa', que se celebra en noviembre, por lo que será una gran opción cultural si vas a visitar la ciudad durante este mes. El edificio que acoge este ecléctico e interesante programa cultural es del siglo XIX, y su interior cuenta con una decoración que recuerda a un tradicional teatro antiguo.
Terraza Momo
Noches de música y magia en un entorno realmente encantador.
Lo mejor, su terraza interior
Seguramente recuerdes al personaje de la novela 'Momo', escrita por Michael Ende y publicada en 1973. Aquella historia debió de gustar tanto a los dueños de este local que convirtieron a su protagonista en la auténtica estrella del bar que lleva su nombre, en homenaje a la obra del autor alemán. El Momo abrió sus puertas en los años 80, y desde entonces destaca por tener un encanto especial y por un decorado que llama poderosamente la atención. Muy conocida es su terraza interior, que intenta simular una parisina y que queda complementada con otros elementos urbanos como un semáforo. Es una opción perfecta para disfrutar de un sabroso cóctel y disfrutar de un rato agradable. Afuera tienen también una terraza con jardín y con unas vistas muy románticas. El gran colofón lo ponen sus actuaciones musicales, con shows en directo todos los martes y jueves; los viernes se suelen organizar actuaciones de magia e ilusionismo.
Bar Negreira “O Pataca”
Auténticamente gallego. Sus patatas asadas son exquisitas.
De los de toda la vida
¿Eres de los que adoran la tradición y el buen hacer cuando hablamos de gastronomía? Entonces llegaste al lugar indicado, toda una eminencia en Santiago. El Negreira, aunque es más conocido como 'el Pataca', es un bar típico de cañas y tapas, ideal para comenzar la noche cenando algo barato y disfrutando de un ambiente sin parangón; de los de toda la vida, para entendernos. Está ubicado en el centro histórico de la ciudad. Su declaración de intenciones ya queda clara desde la fachada y desde el escaparate que se ve desde fuera: marisco por doquier, como boquerones, mejillones, calamares o vieiras, todo realmente exquisito. ¿Y sabes lo mejor? Que con cada consumición te sirven una rica tapa de patata asada como cortesía de la casa, una buena costumbre que ya se está perdiendo en muchos otros bares. Es posible toparte con algún turista, pero sigue manteniendo su clientela fija de siempre: garantía de calidad.
Modus Vivendi
Y llegamos a la cueva más animada de Galicia, un must en toda regla.
Pub con carácter añejo
Bienvenido a uno de los pubs más antiguos de Galicia, ubicado en las caballerizas del palacio de Somoza. El Modus Vivendi es otra referencia de la noche capitalina, un auténtico must, pues en él se dan cita todo tipo de expresiones artísticas, como teatro, exposiciones de fotografía, pintura... y música, sobre todo música: aquí podrás disfrutar de estilos tan dispares como groove, funky, latin-jazz o rock, un amplio abanico de posibilidades que contentará a cualquier paladar. Este local es una especie de cueva de lo más acogedora, ideal para charlar tranquilamente con los amigos o para desconectar de la rutina semanal. Se encuentra dividido en dos ambientes bien diferenciados: de un lado, la zona de la barra; de otro, la zona baja del pub, que en su día fueron unas caballerizas, conservando incluso la rampa y el abrevadero de los animales, que actualmente hace las veces de mesa. No es muy grande, lo que hace que, debido a su gran éxito, los fines de semana siempre esté totalmente lleno. Totalmente recomendable.
Itineris
Kayak, barranquismo, tiro con arco, escalada, paintball... ¡Opciones infinitas!
¿Buscas aventura? Éste es tu sitio
Éste es el lugar idóneo para descargar adrenalina y pasar una divertida tarde si viajas en familia, en pareja o con un grupo de amigos. Sin duda, el centro de ocio y aventura Itineris se erige como algo totalmente diferente, con opciones que quizá antes de llegar a Santiago ni siquiera te habías llegado a plantear. Hablamos de una empresa de turismo activo que lleva a cabo un sinfín de actividades de aventura, emocionantes todas ellas, como rutas en kayak y rafting, barranquismo, escalada, tiro con arco, rutas a caballo e, incluso, paintball en el bosque, prestándote los protectores, los monos y todo lo necesario para llevar a cabo una lucha encarnizada entre equipos. A pesar de que se encuentra ubicado a 21 kilómetros de la ciudad, en el Concello de Brión, merece mucho la pena llegar hasta aquí y así vivir una experiencia turística diferente. Su equipo está formado por especialistas en aire libre, un equipo de formadores y técnicos en salud.
Bar Pepa a Loba
¿Lo mejor? Su terraza, sin duda. Un lugar con encanto especial.
Clásico donde los haya
Sus más de veinte años de vida lo convierten en un auténtico referente de la noche compostelana, todo un clásico. El Pepa a Loca es un café-bar emplazado en la zona vieja de la ciudad que encarna todas las buenas virtudes de un local: buena música, buenas bebidas y un inmejorable ambiente. La música variada es una de sus señas de identidad, pues siempre podrás escuchar melodías diferentes, con alma; de hecho, los miércoles y jueves suele albergar conciertos de grupos nacionales e internacionales. ¿Quieres más tranquilidad? Entonces no te puedes perder su famosa terraza durante la época estival, cuando se convierte (aún más) en una de las mejores opciones para tomar un té, un café o incluso la primera copa de la noche. También, si nunca la probaste, en ocasiones hacen el ritual de la queimada, la misteriosa bebida gallega. Su fachada puede llegar a confundir, pues parece más una casa que un bar, pero una vez que atraviesas su puerta... ¡comienza el hechizo!
Plaza del Toral
Especialmente ambientada en verano, alberga un sinfín de eventos culturales.
Une el casco nuevo con el viejo.
Este foro es uno de los más concurridos de Santiago, más que nada porque se encarga de unir la parte nueva de la ciudad con el casco antiguo, un enlace entre dos mundos. Hablamos de un verdadero punto neurálgico de la ciudad. La Plaza del Toral está ambientada especialmente en época estival, cuando el clima acompaña, y se caracteriza por un ambiente cultural de primera: aquí se llevan a cabo conciertos al aire libre, se proyectan cortometrajes, actúan payasos y se programan un sinfín de ocpiones de ocio orientadas a todo tipo de público. Es un sitio ideal para pasear al mediodía o al caer la tarde y dejarte llevar, pues alberga una esencia que te acabará atrapando; la mágica energía que se respira sólo es comparable a lo encantador del entorno. En esta plaza está ubicado también el Palacio de los Marqueses de Bendaña, datado del siglo XVIII y muy conocido por tener un atlas con una bola del mundo en lo alto de su fachada.
Pazo de Vaamonde
Casa gallega llena de contrastes, tanto con el entorno como consigo misma.
Palacete barroco.
Los pazos son las casas típicas gallegas, y éste es realmente particular: hablamos de un palacete de estilo barroco edificado en el siglo XVIII que marca un punto de inflexión en relación con el resto de edificaciones adyacentes. El Pazo de Vaamonde sobresale por sus preciosos soportales y los arcos que los sustentan, así como por el gran escudo que figura en la fachada y por el atractivo llamador que tiene la puerta principal, obra del afamado escultor Francisco Asorey. En el interior contrastan los colores blancos de las paredes con los marrones de la madera antigua de sus puertas y balcones; también por la bella cristalera de la puerta interna. Aunque no se puede visitar por dentro, sólo por el exterior del edificio ya merece la pena acercarse hasta aquí. Como curiosidad, a uno de sus lados se encuentra el Callejón de Entrerrúas, la calle más estrecha de Santiago.
Catedral de Santiago de Compostela
Ubicada en la inmensidad del Obradoiro, seguro que no te dejará indiferente.
Mítica, legendaria, sobrecogedora
Fue en pleno siglo IX cuando se inició la construcción de uno de los templos más espectaculares de toda la cristiandad, una catedral por la que pasan cada año miles y miles de personas para presentar sus respetos al gran patrón de España, cuya tumba se encuentra bajo el Altar Mayor de la catedral. ¿Qué la hace especial? Por ejemplo, que cuenta con diferentes fachadas ejecutadas en distintos estilos arquitectónicos, como barroco o románico, y la perfecta grandiosidad de su interior. Quizá la fachada más conocida sea la del Obradoiro, orientada hacia esta plaza, especialmente sugestiva cuando goza de iluminación nocturna. No menos llamativo es el Pórtico de la Gloria, realizado en estilo románico durante el siglo XII y que que cuenta con infinidad de detalles y esculturas, como la de los evangelistas o el propio Santiago. Su importancia es tal que en el año 1985 fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Arco de Mazarelos
Una de las siete puertas por las que se entraba a la ciudad, la única que sigue en pie.
Restos de la muralla compostelana
Hubo un tiempo en el que Santiago de Compostela fue una ciudad amurallada, durante la Edad Media, una fortificación que le otorgaba seguridad y que desarrollaba funciones defensivas. En aquella época eran siete las puertas que permitían el acceso a la urbe; de todas ellas ya únicamente se conserva en pie el Arco de Mazarelos, todas las demás fueron derribadas entre los siglos XVIII y XIX. Se trata de un arco de medio punto, de estilo románico y construido en sillería de granito, convertido actualmente en un auténtico símbolo de la capital. De hecho, es uno de los monumentos más visitados del centro histórico, un lugar por el que los turistas cruzan pensando que se adentran en otra época pasada. Está ubicado entre la Plaza de Mazarelos y la calle Cardenal Payá. Según consta en diferentes escritos, era a través de esta puerta por donde entraba a la ciudad el preciado vino desde Orense.
Pazo de Fonseca
¿Una puesta de sol espectacular? No te pierdas su claustro durante el atardecer.
Historia convertida en biblioteca
Edificio del siglo XVI que fue mandado construir por el entonces arzobispo Alonso de Fonseca, dedicado en sus orígenes a estudios de teología. Su fachada es de inequívoco estilo renacentista, consta de dos cuerpos y de ella sobresalen diversas estatuas en la que se representan a los Doctores de la Iglesia. Su claustro interior es quizá lo más llamativo del edificio, un lugar bendecido con tanta belleza que no puedes perderte. Fue proyectado por el arquitecto Gil de Hontañón en estilo plateresco, y desde aquí incluso se pueden divisar las torres de la catedral. ¿Una recomendación personal? Visítalo al caer la tarde, durante el ocaso, pues es entonces cuando la luz del sol incide de manera especial sobre el patio para colarse entre sus ventanales y crear una estampa espectacular. Sus tonos anaranjados no se te olvidarán fácilmente. En la actualidad, el Pazo de Fonseca alberga la Biblioteca General y pertenece a la Universidad de Santiago.
Puerta Santa o del Perdón
Son miles las personas que atraviesan esta puerta cada Año Jubilar.
Una experiencia única
Atravesar esta puerta es un privilegio que no todo el mundo puede disfrutar, así que siéntete afortunado si lo consigues. ¿El motivo? Porque únicamente se abre mediante una curiosa ceremonia la víspera de los años jubilares (el 31 de diciembre), es decir, cuando la festividad de Santiago, el 25 de julio, cae en domingo; luego permanece abierta durante los doce meses del año santo. Está ubicada en la parte trasera de la Catedral de Santiago, y para entrar se suelen formar unas larguísimas colas de peregrinos y visitantes que llegan de cualquier parte de España, de Europa y del mundo ávidos por abrazar al apóstol. Sin embargo, no se trata de la puerta original, ésta se ubica dentro de la catedral. La Puerta del Perdón es la más cercana a las famosas escalinatas frente al templo. También es conocida como la Puerta de los 27 Sabios debido a las figuras que descansan a sus lados: 24 señores del Apocalipsis, un apóstol y dos discípulos.
Escultura de Valle-Inclán
Sin duda, el personaje más fotografiado de la capital gallega.
Merecido homenaje al gran escritor
Galicia ha dado múltiples autores de renombre durante la historia de la literatura española, y quizá uno de los más queridos sea Ramón María del Valle Inclán, famoso por su larga barba y por ser uno de los mejores representantes de la corriente modernista. Es un compostelano ilustre. La obra, que se inauguró en el año 1999, fue realizada en bronce por el escultor César Lombera. Esta escultura le rinde un sincero homenaje justo en la zona donde le gustaba llegar para contemplar la belleza de la catedral durante las épocas que vivía en la ciudad, y está colocada sobre uno de los bancos del Parque de la Alameda, en el Paseo de los Leones: esto permite que puedas sentarte junto al autor e inmortalizar el momento, convirtiéndose así en el personaje más fotografiado de toda la capital. ¿Alguna vez imaginaste tener una selfie con un escritor nacido en el siglo XIX?
Las Dos Marías
Estatuas que inmortalizan a las dos hermanas más famosas de Santiago.
¡Que vivan Maruxa y Coralia!
Sí, son un auténtico símbolo de la ciudad, dos estatuas muy queridas por los compostelanos que guardan una divertida historia: Las Dos Marías fueron dos hermanas que, durante los años 50 y 60, salían a pasear por el centro histórico de Santiago ataviadas con trajes estrafalarios y maquilladas profusamente para flirtear con los jóvenes universitarios que se daban cita en la capital. Curiosamente, siempre lo hacían al mediodía, que era cuando los estudiantes iban a comer y existía un mayor ajetreo por las calles; a esto se debe que también reciban el nombre de 'Las Dos en Punto'. Las esculturas de bronce que inmortalizaron a Maruxa y a Coralia fueron realizadas por César Lombera, y se ubican en el Parque de la Alameda. Su figura llegó a ser tan conocida que incluso se filmó un documental sobre ellas, llevado a cabo por el escritor Xosé Rivadulla Corcón.
Hostal de los Reyes Católicos
No sólo destaca por su exterior, también por sus cuatro patios interiores.
Antigua e histórica hospedería.
Una de las visitas obligadas en la capital gallega. Se trata de un parador que fundaron los propios Reyes Católicos de España, Fernando e Isabel, para acoger a los peregrinos que finalizaban el Camino hasta Santiago. Sin embargo, originariamente fue un hospital que atendía a los caminantes, siendo este motivo el que hizo que los monarcas visitaran la ciudad en 1486. Levantado ya en el siglo XVI tras diez años de obras, también se encuentra ubicado en la Plaza del Obradoiro. ¿Lo mejor del edificio? Su magnífica fachada de estilo gótico plateresco, realmente bella, que da acceso a cuatro patios interiores que conforman entre ellos una cruz griega y que te dejarán con la boca abierta gracias a sus arcos estilizados y al misticismo que puedes respirar dentro de la estancia. En la actualidad es un Parador Turístico de cinco estrellas, uno de los alojamientos más lujosos de la ciudad.
Pazo de Raxoi
Célebre por su impactante fachada y por su ático abalaustrado.
El precioso ayuntamiento de la ciudad
Hablamos de uno de los principales monumentos de Santiago, tanto por su importancia cotidiana como por su naturaleza arquitectónica y artística. El Pazo de Raxoi es la sede del ayuntamiento de la ciudad, aunque también alberga de algunas dependencias del Gobierno de la Xunta de Galicia y del Consello de Cultura Galega. De marcado estilo neoclásico francés, se terminó de construir en el año 1766 por encargo del entonces arzobispo Bartolomé Raxoi, de ahí el nombre. Está localizado en plena Plaza del Obradoiro, admirando impasible la esbelta catedral. Su impresionante fachada resulta especialmente llamativa por sus soportales inferiores y por la representación en mármol de la Batalla de Clavijo, célebre lucha que tuvo lugar durante la reconquista cristiana; además, se encuentra coronada por un ático abalaustrado y una impactante imagen del apóstol Santiago. Pero no todo termina aquí: en su interior destaca una increíble escalera de estilo rococó. ¡Te encantará!
Dolmen Novo Milenio
Líneas sencillas y gran luminosidad en esta escultura del gran Silverio Rivas.
Alegoría entre dos tiempos
Inaugurada en el año 2000 con motivo de la capitalidad europea de la cultura de Santiago, esta peculiar escultura se encuentra ubicada en el Parque de la Música, justo enfrente del auditorio de la ciudad. El Dolmen Nuevo Milenio es obra del polifacético artista gallego Silverio Rivas, uno de los más conocidos de la región, que en esta ocasión quiso plasmar un guiño al futuro que representaba el nuevo siglo inspirándose en una construcción de carácter prehistórico; no en vano, en bretón, 'dolmen' significa 'mesa grande de piedra'. Una mezcla de períodos realmente alegórica. Se trata de una obra de líneas sencillas, claras, que se apoya sobre tres columnas, cuya intensa iluminación llama poderosamente la atención al contrastar de una manera notable con el verde del entorno. Está elaborada en granito, la piedra gallega por excelencia. Llegar hasta aquí no te será difícil gracias a su céntrica localización.
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