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Guía turística: qué hacer y ver en Chicago
Jazz entre rascacielos.
Lo primero que pensamos cuando hablamos de Chicago es, “Michael Jordan y rascacielos”, pero Chicago no es solo granito y deporte. En Chicago, la segunda más grande de EEUU después de Nueva York, disfrutarás del ambiente y la música más variopinta; es una parada obligada el tomarte un cocktail en uno de sus muchos clubs de jazz, al más puro estilo Al Capone en los años 20. Viaja en su red de trenes: saldrás fascinado después de recorrer todos los barrios de Chicago a través de este medio de transporte, que fusiona lo tradicional y lo contemporáneo mientras viajas entre más de 1.000 “edificios altos”. Una vez vistos los rascacielos desde abajo, ¿te atreves a visitar el rascacielos más alto de todo EEUU? Exacto, Willis Tower es además el cuarto edificio más alto del mundo, y se encuentra en Chicago. Deja el vértigo en casa y disfruta al máximo.
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The Underground
Si quieres vivir la noche de Chicago, déjate caer por este local y ¡disfruta!
Ser el rey de la pista en el local de moda.
Chicago duerme poco y a veces. The Underground (www.theundergroundchicago.es) es el lugar de moda por excelencia donde podrás encontrar caras conocidas en la pista o bailar al son de la música de disc-jockeys muy prestigiosos. En este club donde no son extrañas las fiestas privadas, como no podía ser de otra manera, las botellas de las marcas más conocidas están sobre las mesas de los reservados. Diseñado como un escondite militar con mapas que se iluminan colgados de las paredes, a partir de medianoche los camareros ofrecen pequeños bocadillos para asentar un poco el estómago después de tantas copas. Situado en West Illinois Street, abre los jueves, viernes, sábados y domingos a partir de las diez de la noche.
Un partido de los Bulls o de los Blackhaws en United Center
Si tienes la oportunidad, no desperdicies la oportunidad de vivir un partido de basket americano.
El templo de los Chicago Bulls.
Entrar en el United Center pone los pelos de punta a todos los amantes del deporte. En la puerta de este pabellón de eventos se encuentra la famosa estatua de Michael Jordan, el jugador más grande de la historia de la NBA, diseñada por Omri y Julie Rotblatt-Amrany e inaugurada el 1 de noviembre de 1994. Colocado sobre una base de granito negro, crea la ilusión de que el genial jugador está volando en el aire. Aquí no sólo se han jugado los mejores partidos de la NBA y la NFL sino que en sus casi 90.000 metros cuadrados también se han celebrado grandes eventos musicales como conciertos de The Rolling Stones, Bruce Springsteen, Barbra Streisand o Pearl Jam. Si vas en temporada, tendrás la posibilidad de ver como los Blackhaws juegan al hockey o vivir la emoción de un partido de baloncesto de los Bulls. Podrás comprar entradas para los partidos en www.blackhawks.nhl.com o www.nba.com/bulls, o ver los próximos eventos del United Center en www.unitedcenter.com/calendar.
Paseo por Chinatown
Siempre es bonito pasear por el barrio chino y ver la cultura tan diferente al resto de la ciudad.
China a tus pies y sin salir de Chicago.
En el lado sur se encuentra este pequeño espacio que traslada al visitante al sorprendente mundo oriental. Desde que entras por su curiosa y típica entrada, Chinatown Gate (www.chicagochinatown.org), podrás comprar todo tipo de productos en sus pequeños locales y tiendas de souvenirs, disfrutar de sus restaurantes de comida china, descubrir los lugares donde comprar plantas medicinales u objetos de la cultura china, además de sus preciosas tiendas de flores. Entre sus calles, llenas de asiáticos y curiosos turistas, podrás disfrutar no solo de los originales productos que venden, sino también de los olores que desprenden los restaurantes y los colores de las fachadas de sus edificios y locales. Aquí también encontrarás un templo budista (www.budtempchi.org), un oasis y lugar perfecto para meditar dentro del trajín de la ciudad, que podrás visitar los domingos por la mañana.
Pops for Champagne
Tómate algo en alguno de estos locales para finalizar tu día.
Variedades de champán y deliciosos platos.
Pops for Champagne (www.popsforchampagne.com) es famoso por su extensa carta que cuenta con hasta 200 tipos diferentes de espumosos. Ubicado en el 601 de North State Street, en River North, se trata de un afterwork en toda regla y un lugar perfecto para tomar una copa tranquilamente a primera hora de la noche. Es recomendable acercarse hasta aquí los domingos o martes para disfrutar con los sonidos de fondo de una banda de jazz en directo. También ofertan menús con riquísimos productos de temporada incluyendo caviar, queso y embutidos. En North Rush Street está The Drawing Room (www.thedrchicago.com/bar), con una gran variedad de cócteles que van desde los más tradicionales hasta las creaciones más modernas. Organizan eventos para grupos en los que introducirse en el mundo del cóctel. Otra opción muy recomendable es The Back Room (www.backroomchicago.com), donde podrás escuchar la mejor música en directo después de cenar o tomarte una copa.
Conocer la historia de la ciudad de un vistazo en el Puente de Michigan
Te sentirás abrumado al ver la grandiosidad de este puente.
Un símbolo para la ciudad.
Aquí se unen los edificios en el horizonte, el asfalto de la calle, el agua del río, los coches y los barcos de turistas atravesándolo. Es uno de los iconos de la ciudad y, uno de los lugares más fotografiados por los turistas. Construido entre 1918 y 1920, aunque renovado en 1928, este puente levadizo fue diseñado por Edward Bennett. En sus cuatro torres de caliza están representadas las cuatro partes de la historia de la ciudad: Pioneros, que representa los primeros comerciantes, Descubridores con los exploradores, Defensa, que se refiere a la llamada de socorro y, finalmente, Reconstrucción tras el gran incendio de la ciudad. Como curiosidad, fue construido como dos puentes y, si es necesario, se puede elevar una parte mientras el tráfico continúa pasando por el otro lado.
Otra forma de recorrer las aguas
Esta es una actividad muy divertida, segura y sana, así que ¡todos al agua!
Desplázate tu mismo por el río.
Si te gusta la aventura además de visitar la ciudad a tu ritmo, la mejor opción para recorrer el río será alquilar un kayak individual o doble y hacer ejercicio por sus aguas. Con ofertas para grupos y opción de llevar un guía, podrás decidir tu destino o simplemente deambular y descubrir los muelles de la ciudad. En Waterides (www.wateriders.com) puedes alquilar un kayak por 20 dólares la hora o un tour guiado por alrededor de 60 dólares; además de tener la misma opción a un precio parecido en Kayak Chicago (www.kayakchicago.com), de miércoles a sábado. En Urban Kayaks (www.urbankayaks.com) ofrecen guía además de el alquiler que te permitirá ir a tu ritmo. Si quieres probar una nueva e intrépida experiencia te recomendamos que te acerques al muelle de Navy Pier para subirte en el Seadog (www.seadogcruises.com) donde podrás hacer un divertido tour a bordo de una rápida lancha motora con la que saltarás sobre el agua. Como aviso a navegantes, si te sientas detrás, te mojarás.
Taxi!
En Chicago todo es posible, incluso coger un taxi por el río.
¿Te imaginas un taxi por el agua?
Coger un ‘water taxi’ para ir a algún lugar de la ciudad es toda una hazaña. Estos curiosos vehículos acuáticos te llevarán de un punto turístico a otro en un singular trayecto sin necesidad de acabar en un atasco. Hay dos compañías que se dedican a trasladar a locales y turistas entre sus diferentes paradas a lo largo del río, como Water Taxi (www.chicagowatertaxi.com/SitePages/Home.aspx) o Shoreline Water Taxi (www.shorelinesightseeing.com/watertaxis). Los distinguirás porque son amarillos y porque siempre llevan a alguien a bordo. Te animamos a vivir una experiencia diferente y divertida, muy aconsejable también por su reducido y asequible precio, además de porque todas sus paradas están cerca de lugares históricos como museos o Michigan Avenue. Recomendable siempre y cuando vayas a algún lugar que esté situado cerca del río.
Un paseo tradicional en barco por el río de Chicago
Un paseo por el río y a disfrutar de las vistas de la ciudad.
Otra manera de conocer Chicago.
El río es el corazón de Chicago que divide la ciudad en dos. En su desembocadura al inmenso Lago Michigan encontrarás unas vistas maravillosas del skyline pero, sin lugar a dudas, no hay mejor manera de ver la ciudad que recorriendo sus aguas. A bordo del crucero Chicago’s First Lady (www.cruisechicago.com), por unos 47 dólares, realizarás una excursión en la que guías expertos en arquitectura te explicarán la historia de sus edificios. En Chicago Line Cruises (www.chicagoline.com) puedes elegir entre una visita arquitectónica o histórica por 40 dólares. Si te decides por subir a uno de los barcos más pequeños te enterarás de curiosas y divertidas anécdotas como que el día de San Patricio tiñen con un pigmento no tóxico el agua de su río de color verde en honor a la comunidad irlandesa de la ciudad, una de las más grandes del país. Podrás también elegir entre los tours temáticos de Mercury Cruises (www.mercurycruises.com), Shoreline Sightseeing Company (www.shorelinesightseeing.com) o Wendella Sightseeing Boats (www.wendellaboats.com).
Las playas de agua dulce de Chicago
Tanto para tomar el sol como para darte un baño o simplemente pasear, Chicago te ofrece sus playas.
La playa de Chicago.
Gracias a su larga costa se han ido construyendo por la ribera del lago hasta 33 playas en las que disfrutar de un apacible baño o un rato de descanso. En la zona norte, alrededor del Loyola Park, encontrarás diversas playas continuas como Leone o Jarvis Beach Park, Columbia y Hartigan Beach Park. La única que permite pasear con perros es Montrose Beach, muy cerca de North Avenue Beach, perfecta para ir en familia y con unas impresionantes vistas de la ciudad. Tras construir un rompeolas en la desembocadura del río, se fue acumulando arena que, con el paso del tiempo, se transformó en Oak Street Beach, una isla artificial que se ha convertido en un oasis para los amantes del sol y que cuenta con un paseo para disfrutar en bicicleta o patines. Al sur, en Jackson Park, está 63rd Street Beach, que fue construida en 1919, siendo desde entonces una de las más concurridas.
Chicago Shakespeare Theatre
Este teatro podría considerarse único por sus características.
La magia de Shakespeare.
El entretenimiento es algo que nunca falta en Chicago y te invitamos a que lo disfrutes. En este teatro no esperes encontrar tradicionales obras de teatro, sino más bien producciones extraordinarias de carácter contemporáneo del aclamado William Shakespeare para que el público se sienta reflejado en sus maravillosas historias. Desde 1986, en este rincón del histórico Navy Pier, se ha dado nueva vida a las atemporales historias incluyendo también producciones musicales creativas y más tradicionales. Con un cartel que varía según la temporada, en sus dos íntimas salas podrás ver una maravillosa puesta en escena inspirada, siempre, en las eternas ideas que Shakespeare tenía sobre la condición humana. Una gran experiencia teatral que cuenta con diversos premios de teatro, entre los que se encuentra el Premio Regional de Teatro Tony, que no debes perderte. (www.chicagoshakes.com)
Chicago Theatre
Si ya solo el edificio te dejará sin palabras, ver algún espectáculo en él será algo inolvidable.
La meca del arte en Chicago.
La grandeza de este lugar deja sin aliento a quién lo visita. Si tu bolsillo te lo permite, compra alguna entrada para poder disfrutar de este hermoso auditorio, que acoge hasta 3.600 personas, y así admirar sus murales, su majestuoso escenario y sus lámparas de bronce y cristal. Inaugurado en octubre de 1921, este edificio de estilo barroco que costó 4 millones de dólares parece más un suntuoso palacio de película que un auditorio. Su fascinante fachada, con el famoso luminoso ‘Chicago’ es sólo un aperitivo de lo que te encontrarás en el vestíbulo inspirado en la Capilla Real del Palacio de Versalles. Después de estar cerrado unos años, las autoridades evitaron su demolición y, tras una restauración millonaria, volvió a abrir sus puertas el 10 de septiembre de 1986 con Frank Sinatra sobre el escenario. Desde entonces, por sus tablas han pasado artistas como Alicia Keys, Oasis, David Letterman, Dolly Parton, Diana Ross o Aretha Franklin. De mayo a agosto organizan visitas por su interior para mostrar su espléndida sala, el escenario o ver el muro de autógrafos. Podrás comprar entradas o conocer la programación del cartel en www.thechicagotheatre.com.
Historic Jewelers Row
Aunque solo sea para ver escaparates, acércate a esta zona y ve las virguerías que se pueden llegar a hacer.
¿Te gustan las joyas?
A lo largo de Wabash Street y alrededores encontrarás los escaparates con más brillo de la ciudad. Aunque los precios son desorbitados, te invitamos a que te dejes deslumbrar por las piedras preciosas y diamantes que se exponen en este barrio dedicado exclusivamente a la joyería. Dentro de The Jewelers Center (www.jewelerscenter.com), una especie de centro comercial de las joyas, encontrarás más de 190 expertos joyeros de todo el mundo que te ofrecerán exactamente el objeto o diamante que deseas, se encargarán de crear tu pieza personalizada o de reparar alguna, si así lo deseas. Podrás llegar en la línea roja del metro y, una vez aquí, te recomendamos dejarte llevar por los brillantes mientras descubres preciosas joyas, relojes y perlas.
Unas compras de lo más dulce
El placer de comer chocolate se materializa en cualquiera de estos locales que te volverán loco.
Para los más golosos.
Los más golosos podrán probar o llevarse a casa todo tipo de caramelos y dulces en West Kinzie Street donde se encuentra Blommer Chocolate Company. Aquí podrás adquirir deliciosos chocolates de cualquier sabor, tamaño y forma ya es una tienda que pertenece a los mayores fabricantes de este producto en América. En Lincoln Park y Michigan Avenue encontrarás Voges Haut-Chocolat (www.vosgeschocolate.com), una boutique de lujo especializada en exóticos sabores de chocolate como, por ejemplo, una sorprendente y riquísima mezcla con bacón. Sólo con ver su escaparate y oler el chocolate en el ambiente te derretirás. Finalmente, si eres un amante de las golosinas, el paraíso del azúcar lo encontrarás en Candyality (www.candyality.com), una divertida tienda repleta de colores y sabores con todo tipo de novedosas y tradicionales piruletas y dulces.
Souvenirs
Los tienes de todo tipo, incluso comestibles, así que busca y llévate el regalo ideal.
Recuerdos de Chicago.
Si lo que deseas es algún souvenir como recuerdo de tu viaje en Chicago, podrás encontrar muchos lugares donde adquirir el producto que buscas. Por supuesto, en las tiendas de los museos encontrarás agendas, calendarios, libretas y objetos relacionados con las exposiciones de arte del interior. Si el regalo que buscas es para un amante de la arquitectura, qué mejor que acercarte a Chicago Architecture Foundation o a la casa/estudio de Frank Lloyd Wright, donde encontrarás edificios en miniatura y una gran variedad de libros sobre el tema. También puedes elegir Garrett Popcorn para comprar alguna de sus extrañas variedades de palomitas. En Chinatown hay muchísimas tiendas pequeñas con souvenirs baratos de la ciudad como camisetas, sudaderas, gorras, tazas e imanes, entre tantos otros. Además, en Lou Malnatis (www.loumalnatis.com) podrás llevarte a casa alguna de las típicas deep dish pizzas congeladas.
State Street
Otra zona comercial de la ciudad para tus compras y con variedad de estilos y precios.
Compras para todos los bolsillos.
The Loop es otro de los lugares clave para hacer tus compras pero, además de tiendas asequibles para todos los bolsillos, encontrarás obras de arte urbano por sus calles. Cualquier cosa que necesites seguro que está en el edificio de ocho pisos de Macy’s con marcas de diferentes precios y también de diseñadores emergentes locales. Enfrente, en el centro comercial Block 37 descubrirás una mezcla ecléctica de locales con productos de belleza y ropa más selecta. En los escaparates a lo largo de State Street están todas las tendencias de la temporada, tanto en las franquicias como en las tiendas de marcas de diseño. Merz Apothecary una pequeña pero centenaria empresa familiar, ofrece a sus clientes gran variedad de jabones de baño, perfumes y colonias para todos los gustos. Si eres goloso, te recomendamos hacer una parada en Magnolia Bakery para probar sus delicisios cupcakes.
American Girl Place
Volverás a tu infancia por un momento al verte rodeado de estas simpáticas muñecas.
El paraíso de las muñecas.
Durante tu visita a Water Tower no debes olvidar entrar en este curioso y sorprendente mundo de muñecas. Te lo recomendamos más por curiosidad que para comprar ya que, más que una inmensa tienda, este lugar es toda una ciudad dedicada única y exclusivamente a las muñecas de la marca. Aquí las pequeñas de la casa podrán elegir una muñeca a su imagen y semejanza o de cualquiera de sus colecciones, vestirla con el traje que deseen o elegir -junto al estilista en su sala de peluquería- qué diseño quieren que lleven en el pelo. De esta manera cada muñeca se convierte en una pieza única. En el restaurante, la muñeca podrá cenar e incluso hacerse una sesión de fotos con su dueña para recordar este día tan peculiar. Más información en www.americangirl.com/stores/location_chi.php.
Logan Square Farmers Market
De la tierra a la mesa mientras vives una experiencia diferente en este alegre mercadillo.
El mercado de los agricultores.
Durante el verano y el otoño, cuando el buen tiempo acompaña, los domingos de diez de la mañana a tres de la tarde los agricultores de los alrededores instalan un idílico mercadillo en el histórico Logan Square para vender sus productos de la tierra: frutas y verduras, panes, mermeladas, quesos y flores. Mientras admiras la gran cantidad de puestos también puedes desayunar crepes y donuts o tomar un tentempié a media mañana. No es extraño encontrarse en los alrededores con grupos de música en vivo y conciertos improvisados a pie de calle. Además, en Logan Boulevard encontrarás una gran variedad de locales dedicados a libros y regalos infantiles, de imprescindible visita si tienes que hacer algún regalo infantil o vas con niños. Como dato útil, podrás llegar hasta aquí en la línea azul del metro. Toda la información en www.logansquarefarmersmarket.org.
Haberdash
Una boutique para ellos con firmas exclusivas y un trato inmejorable.
Todo para el hombre.
Es la tienda de moda masculina por excelencia, con marcas muy difíciles de encontrar en otros lugares como L.B.M. 1911, RRL, Baldwin Denim, Alden y Gitman Bros. Vintage. La boutique tiene dos tiendas diferentes en North State Street, con marcas americanas y clásicas: Haberdash Bespoke, en 607 North State Street, está dedicada a la ropa urbana y deportiva de lujo y en Haberdash EDC, en el número 611 de la misma calle, venden ropa más casual que podrás utilizar todos los días. Sin lugar a dudas, en Haberdash experimentarás una nueva manera de comprar ya que mientras ves la ropa también podrás acercarte a la barbería y pedir que te afeiten o te corten el pelo, además de probar las colonias de su perfumería. No te pierdas detalle en www.haberdashmen.com.
Luxury Garage Sales
Si este es tu estilo, has encontrado el lugar en donde renovar todo tu armario.
Boutique con prendas únicas.
Esta boutique no es una tienda de segunda mano al uso ya que en ella encontrarás ropa nueva y usada de primeras marcas, accesorios y joyerías. Todo perfectamente ordenado en un precioso local en el que no creerás que muchos de sus productos son vintage; su ambiente es como el de cualquier otra boutique de lujo, aunque con productos más baratos. Situada en el 658 North Wells Street, hay prendas, bolsos y complementos de diseñadores como Chanel, Christian Louboutin, Hermés o Gucci. Las propietarias, Brielle Buchberg y Lindsay Segal, amigas de la infancia, se han rodeado de un personal atento consiguiendo que el ambiente sea especialmente agradable y acogedor. También podrás comprar online en www.luxurygaragesale.com.
Water Tower Place
Aquí encontrarás de todo, además de restaurantes para descansar entre compra y compra.
Un edificio entero para tus compras.
Casi al final de Michigan Avenue, en el 835, hay siete plantas de altura dedicadas a las compras, junto al gigante rascacielos del mismo nombre. Este centro comercial es muy famoso en Chicago no sólo por su perfecta ubicación, sino por su gran variedad de tiendas que van desde las típicas americanas como Abercrombie & Fitch, Aéropostale o American Eagle hasta otras más tradicionales como Lacoste, Oakley o Billabong. Pero no todo es ropa, también hay joyerías y tiendas infantiles de juguetes como la archifamosa American Girl o Macy’s, el Corte Inglés americano. Además, en Water Tower Place podrás probar el genial chocolate belga en Godiva o comer en alguno de sus restaurantes. Abierto de lunes a domingo de 10 de la mañana a 9 de la noche, aunque los domingos cierra a las 6 de la tarde, no podrás resistirte a vaciar tu bolsillo y llenar la maleta. Más información sobre las tiendas que te puedes encontrar aquí en www.shopwatertower.com.
The Magnificient Mile
Una de las mejores zonas comerciales para pasear y, si quieres, darte algún capricho.
Un paseo entre el lujo.
Aproximadamente 1,6 kilómetros, lo que corresponde a una milla, es la longitud por la que se extiende esta famosa y gigantesca zona comercial de la ciudad, a lo largo de Michigan Avenue, desde el río hasta Oak Street. En los escaparates de sus hasta 460 tiendas, encontrarás todo tipo de prendas de las marcas más lujosas del mundo, con exclusivas boutiques como Vera Wang, Cartier, Gucci o Tiffany & Co. En esta zona será difícil decidirte por un lugar para almorzar, comer o tomar un tentempié ya que encontrarás hasta 275 restaurantes. En este paraíso de las compras al aire libre hay tiendas para todos los gustos y bolsillos. No solo de moda sino también establecimientos de belleza, galerías de arte, tiendas de productos gourmet e incluso de animales. Toda la información en su web, www.themagnificentmile.com.
Longman & Eagle
Si quieres probar algo diferente, acércate hasta este restaurante.
Fusión de alimentos y cocinas.
Merece la pena alejarse un poco del centro en metro para llegar hasta North Kedzie Avenue, muy cerca de Logan Square, donde encontrarás un excelente menú que aúna platos de cocina tradicional americana realizada con productos orgánicos y locales con elementos de la cocina creativa. El chef Jared Wentworth se encarga de realizar el menú que varía con frecuencia e incluso a veces diariamente, ya que ofrece únicamente productos de calidad que haya ese día en el mercado. Aunque también puedes acercarte para tomar un desayuno desde las 8 de la mañana, es muy recomendable almorzar o cenar aquí, aunque no podrás saber qué elegir hasta que no estés allí y veas su carta del día. Tras la comida también podrás tomarte uno de sus cócteles de temporada o elegir entre sus 148 wiskhys de la carta. Toda la información en www.longmanandeagle.com.
The Purple Pig
Después de tus compras, aprovecha para ir a uno de los locales típicos de Chicago y probar sus especialidades.
El cerdo es el rey.
Tras las compras en The Magnificient Mile puedes parar en este pequeño local de comida artesana especializada en carne de cerdo y con unos precios muy asequibles. Con una gran variedad de vinos, merece la pena esperar si hay cola (ya que no aceptan reservas con antelación), además de probar sus deliciosos embutidos y los quesos que realizan en colaboración con varios chefs locales. Con un trato del servicio muy atento, los platos estrella son el cerdo frito con almendras y ajo, sus saludables ensaladas y su exquisita oreja de cerdo. Te recomendamos dejes hueco para probar también las especialidades de la casa, la tarta de limón o el Panino con Nutella. Como dato curioso y útil, de domingo a jueves la cocina abre hasta medianoche y, los viernes y los sábados, hasta la una de la madrugada.
Grange Hall Burger Bar
De carne o vegetal y con los ingredientes que tu quieras, estás ante las mejores hamburguesas de la ciudad.
La hamburguesa por excelencia.
Aquí comerás como si estuvieras en una granja típica sureña con sus largas mesas comunes de madera y sus taburetes. Si eres carnívoro, no pierdas la oportunidad de probar la que dicen es la mejor carne de la ciudad, tanto por su sabor como por su receta. Disfrutarás con sus ricas hamburguesas, ya sean de ternera, de pavo o vegetales, y a las que puedes añadir todos los ingredientes que quieras como huevos, cebolla caramelizada, bacón o cualquier otro producto. También podrás elegir entre una gran variedad de quesos y diversos panes y, por unos dólares más, podrás tomarte una cerveza o un refresco con hielo. Además, te recomendamos que pidas en el Grange Hall Burguer Bar (www.grangehallburgerbar.com), situado en el 844 de West Randolph Street, uno de sus desayunos típicos con huevos, patatas, bacón o salchichas.
The Drake Hotel Palm Court Tea Room
Si te gusta el te, vive la experiencia que te ofrecen en este salón.
Una hora y media de placer.
En el hotel Drake, en East Walton Street, podrás disfrutar de un exquisito té durante toda la tarde en su especial tea room. Aunque es recomendable reservar con antelación, no te preocupes porque sólo podrás permanecer un máximo de una hora y media rodeado de un refinado ambiente. Está abierto todos los días desde la una hasta las cinco de la tarde, y de miércoles a domingo podrás disfrutar de fondo de un agradable arpa en directo rodeada. Además de saborear sus excelentes tés de naranja dulce, caramelo jazmín o mora, también podrás tomarte uno de sus sandwiches especiales de tomate y pepino, huevo y ensalada o mantequilla de cacahuete con gelatina, a partir de unos 20 dólares por persona. No te pierdas el menú en www.thedrakehotel.com/dine/palm-court.
Garrett Popcorn Shops
Un universo de palomitas de maiz que no habías imaginado se abre ante ti.
Palomitas de colores y sabores.
Con diversas sedes tanto en The Loop como en los alrededores y en Navy Pier, sabrás que has llegado a una de sus tiendas por las inmensas colas que se forman en la puerta de este mítico lugar. Aquí descubrirás una gran variedad de palomitas que probablemente no conocías, como las de queso cheddar, Chicago Mix (queso y caramelo) macadamia, almendras o nueces. En Garrett Popcorn Shops (www.garrettpopcorn.com) también podrás comprar otros productos y regalos como un pack con diversos sabores para probar un poco de todo, e incluso con los recipientes personalizados con el skyline de la ciudad o el logotipo de los Chicago Bulls. Aunque tras ver la inmensa cola igual piensas que no merece la pena tanta espera para comprar unas palomitas, te recomendamos que te quedes. Verás como, una vez que las pruebas, quieres más.
Desayunar un típico apple pancake
Querrás probar una cosa cada día, ya que ir a Chicago y no hacerlo es casi un pecado.
Imposible resistirse.
Ya sea tanto en su típica cafetería del 22 de East Belleveu Place o en cualquiera de las otras tres (South Western Avenue, East 47th Street o North Lincoln Park West), no puedes irte de Chicago sin desayunar en The Original Pancake House. Disfruta de uno de sus típicos apple pancake, un gigante y riquísimo panqueque de manzanas, azúcar y canela o el Dutch baby, con mantequilla batida y azúcar en polvo. Aquí también podrás probar sus típicas tortitas y waffles (gofres), así como sus exquisitos crepes gourmets con cerezas y vino dulce. Abren a las 7 de la mañana, así que merece la pena madrugar un poco un día para llegar de los primeros, ya que de otra forma habrá mucha cola y tendrás que esperar un rato en la puerta. Descubre su oferta de platos en www.originalpancakehouse.com.
Una experiencia gastronómica en Lockwood
Un lugar diferente para comer con alimentos de gran calidad.
Un restaurante excepcional.
Recomendamos entrar en el histórico Palmer House Hilton no sólo para admirar su genial vestíbulo con históricas alfombras y grandes lámparas, sino también para disfrutar de un idílico menú gastronómico en su restaturante. La cocina, dirigida por el chef Joseph Rose, ofrece un sabroso menú de temporada de inspiración local acompañado de verduras y hierbas aromáticas que cultivan ellos mismos en su azotea. Además de su íntimo comedor para los desayunos, almuerzos y cenas, el restaurante también cuenta con un precioso comedor privado en el que puedes degustar su extensa carta de vinos. Entre sus muchos platos no dejes de probar para almorzar sus riquísimos sandwiches acompañados de una ensalada o, para cenar, el exquisito pulpo, el risotto o el jugoso pato. Eso sí, si no quieres esperar para cenar mejor reserva antes aquí en www.lockwoodrestaurant.com/index.aspx.
Comer en Navy Pier
Después de un día completo, lo mejor es comer en algún restaurante típico en el Pier.
¡A llenar el estómago!
Tras un gran día de diversión en el parque te recomendamos reponer fuerzas en el lugar más típicamente estadounidense, Bubba Gump Shrimp (www.bubbagump.com), cadena de restaurantes inspirada en la famosísima película Forrest Gump. No te olvides de pedir la cesta de camarones al vapor con cerveza o las espinacas con pimientos asados rojos, alcachofas y queso. También puedes probar sus mariscos con arroz y pan de ajo o, si lo prefieres, un plato de pescado con patatas fritas y ensalada de col. Comer un sándwich o una ensalada en Harry Caray’s Tavern (www.harrycarays.com) será también toda una experiencia ya que sus paredes están repletas de artículos deportivos y en sus pantallas siempre hay sintonizado algún partido. Para un ambiente más refinado y unas vistas increíbles al Lago no hay nada mejor como relajarse en Riva Crabhouse (www.rivanavypier.com) mientras pruebas su selección de mariscos frescos, sus ostras o su riquísima sopa de langosta, siempre con un buen vino.
Chicago Style Pizza
El único problema será elegir los ingredientes, por lo demás ¡repetirás seguro!
La famosa pizza al estilo Chicago.
No te puedes ir de la ciudad sin probar su famosa pizza al estilo de Chicago, caracteriza por su gruesa masa, su borde relleno de cualquier ingrediente (puedes ir más allá del típico queso y seleccionar lo que quieras) y, por supuesto, una gran capa de salsa de tomate al fondo. En Gino’s East (www.ginoseast.com), que tiene sus puertas abiertas desde 1966 con diversos establecimientos por toda la ciudad, encontrarás un profundo plato de pizza cocinado en una gran bandeja de hierro al horno que no te dejará indiferente. Antes de irte no te olvides de firmar en algún hueco que encuentres en sus paredes. También podrás degustar este delicioso manjar en Giordano’s, (www.giordanos.com) en su restaurante en Jackson Boulevard, en cualquiera de sus sucursales o en Lou Malnati (www.loumalnatis.com), que también ofrece una gran variedad de la famosa deep dish pizza.
Lavazza Espression Café
Relájate con una de las mejores vistas de la ciudad mientras te tomars un café.
Un café en las alturas.
Si subes a disfrutar del cielo de Chicago desde el Observatorio John Hancock te recomendamos hacer un descanso en el Lavazza Espression Café donde podrás degustar un delicioso café italiano, un refrescante cóctel o un vino con la ciudad, literalmente, a tus pies. También podrás saborear sus pasteles y galletas o descubrir el sabor de su famosa Frittatta Panino, una deliciosa tortilla italiana. En la cocina, que también ofrece ensaladas, parrillas y menús muy saludables, colaboran chefs de gran renombre como el español Ferrán Adriá, ganador de tres estrellas Michelin, o el italiano Moreno Cedroni, poseedor también de dos estrellas. Para encontrar esta cafetería situada en el techo de Chicago sólo tendrás que seguir el aroma del café recién molidos.
Cultura gratuita en Randolph Street y alrededores
Si te quedas con ganas de conocer la cultura local, en esta calle tendrás varios ejemplos muy ilustrativos.
La expresión del arte local.
En el número 77 está el emblemático Chicago Cultural Center, que sirve de escaparate a los artistas locales, con dos magníficas cúpulas de cristales de colores donde podrás disfrutar sin pagar de exhibiciones, conferencias, danza, teatro y música. En el número 66 encontrarás Centerspace Gallery at Gallery 37, con cinco pisos repletos de obras de artistas emergentes que también podrás adquirir, además un teatro y aulas donde se imparten clases de danza, de cocina o de jazz. Muy cerca, en el 224 de Michigan Avenue, está Chicago Architecture Foundation (www.architecture.org), lugar imprescindible para los amantes de la arquitectura y los interesados en la historia de los edificios de la ciudad ya que disponen de diversas visitas guiadas. En la misma avenida puedes entrar en el Museum of Contemporary Photography (www.mocp.org), uno de los únicos lugares dedicados exclusivamente a la fotografía con auténticas joyas de grandes artistas. Al otro lado del río, en South State Street, te recomendamos una visita a Harold Washington Library Center (www.chipublib.org/branch/details/library/harold-washington), una de las bibliotecas públicas más grandes del mundo.
Richard H. Driehaus Museum
Una recreación de cómo era la vida en Chicago en el siglo XIX que te hará viajar en el tiempo.
Viaje a tiempos pasados.
Aunque en su interior no encontrarás una extensa colección de obras de arte, tanto el exterior como el interior de este edifico traslada a quien lo visita a las grandes masiones residenciales del Chicago del siglo XIX. Esta casa, propiedad del banquero Samuel Mayo Nickerson, fue transformada en 2003 por Richard H. Driehaus en un museo muy especial. Su interior mantiene intacta la esencia de la época con elegantes muebles históricos e importantes obras de arte de Louis Comfort Tiffany o los hermanos Herter. Te recomendamos que aproveches esta oportunidad para experimentar, a través de su magnífica arquitectura interior, cómo era la vida en la entonces. A esta bella mansión, ubicada a muy pocos metros de The Magnificient Mille, en el 40 East Erie Street, podrás acceder con una entrada de 20 dólares todos los días excepto los lunes. Toda la información en www.driehausmuseum.org.
Museo Smith de Vidrieras
La historia de Chicago a través de sus diferentes ventanales.
Una visita diferente.
Esta exposición permanente de entrada gratuita, abierta desde el año 2000, es el primer museo del país dedicado exclusivamente a las vidrieras. Ubicado en Navy Pier, está formado por 150 vidrieras, tanto religiosas como seculares, divididas en cuatro categorías: victorianas, de naturaleza, modernas y contemporáneas. Cada ventana ofrece una visión única y especial de la historia cultural y artística de la ciudad desde 1870 hasta la actualidad, mostrando la evolución tanto de los diferentes barrios y zonas culturales como de los diversos estilos artísticos. El museo también cuenta con piezas únicas como retratos de grandes personalidades entre las que destacan Martin Luther King o Michael Jordan, una curiosa ventana creada a partir de botellas de gaseosa e incluso algunas vidrieras de Tiffany Glass Company de Nueva York, uno de los diseñadores de cristal más famosos de Estados Unidos. Como dato práctico, abre todos los días del año desde las diez de la mañana.
Art Institute of Chicago
Una importante colección pictórica para los amantes del arte.
Uno de los principales museos del país.
Indispensable pasar un día de nuestra visita a la ciudad fascinándose entre las grandes obras de pintura impresionista firmadas por los mejores artistas de la historia como Two Sisters (On the Terrace) de Renoir, Self-Portrait de Van Gogh o Ballet at the Paris Opera de Edgar Degas. Además, aquí, los muros del segundo museo de arte más grande del país también albergan una extraordinaria colección de obras modernas y contemporáneas de Dalí, Matisse, Picasso, Warhol o Pollock, entre muchos otros. Destaca American Gothic, de Grant Wood, una de las imágenes más conocidas del arte estadounidense del siglo XX. En las Salas de miniaturas Thorne te convertirás en un gigante rodeado de los detallados interiores de las residencias europeas hasta los años 30 y de los muebles de los hogares americanos. Cerrado de sábado a martes, merece la pena pagar los 23 dólares de la entrada para admirar el mejor arte del mundo. Te invitamos a que conozcas más de cerca la colección en www.artic.edu.
Museum of Science and Industry
Participa y haz tus propios experimentos para dar respuesta a esas preguntas que te has hecho alguna vez.
Un museo muy activo.
Este lugar no es apto para los que les gusta entrar en un museo para pasear tranquilamente por sus salas y admirar sus obras ya que aquí te verás obligado a explorar por tu cuenta y participar en sus exhibiciones. Elegido como uno de los 15 museos imprescindibles del mundo por la revista Life, rodeado de ciencia disfrutarás de una experiencia inolvidable en este curioso lugar. En sus salas podrás investigar los motivos de los fenómenos naturales a través de asombrosos experimentos y dar respuesta a preguntas como ¿por qué se produce un tornado? ¿y un rayo? Sus más de 35.000 objetos seguro te dejarán con la boca abierta como el U-505 Submarine, el único submarino alemán en los Estados Unidos. También podrás tener una aventura científica con un espectáculo único en la cúpula del teatro Omnimax o subir en el simulador de movimiento. Las líneas 2, 6 y 10 del autobús te llevarán hasta el museo, que está situado en Lake Shore Drive. Toda la información en www.msichicago.org.
Shedd Aquarium
Una completa visita a este acuario puede ser otro plan alternativo para conocer la relación de Chicago y el mar.
Acércate a la vida marina.
Para conectar con el mundo animal no hay mejor lugar en la ciudad que visitar este oceanográfico cubierto. Su creador, John G. Shedd, quiso que Chicago tuviera un acuario de grandes dimensiones donde tanto vecinos como turistas pudieran descubrir el mundo marino. Así, en 1927, gracias a las aportaciones privadas, se comenzó a construir en el Museum Campus el acuario más grande del mundo con una enorme piscina de agua dulce con especies de peces, reptiles y anfibios de todo el mundo. Años más tarde, se erigió el acuario interior con agua de mar traída en tren desde Florida. Inaugurado en 1930, el acuario tiene dentro de su histórico edificio la mayor variedad de vida marina, con 32.500 seres vivos que nadan y se arrastran entre sus peceras. Delfines, pingüinos, nutrias, pulpos, tiburones y ranas son sólo algunos de los animales con los que podrás disfrutar en estas instalaciones. Podrás conocer los animales en www.sheddaquarium.org.
Adler Planetarium
Una curiosa experiencia que te descubrirá los misterios de la astronomía.
Disfruta del cielo de Chicago.
Pese a que fue el primer planetario de Estados Unidos, su constante renovación y actualización lo han posicionado como el de mejor tecnología del mundo. Dentro de sus inmensas salas volarás al desconocido y sorprendente cielo mientras admiras las estrellas y conoces sus secretos mejor guardados. Aquí, en el centro del Museum Campus, descubrirás el avance en la astronomía y la evolución de las herramientas utilizadas a lo largo de la historia para estudiar las constelaciones. También verás como se sentía la población cuando creían que la Tierra era el centro del universo y vivirás una alucinante e inquietante aventura interactiva en sus teatros de proyecciones planetarias. En la esfera Atwood podrás comparar el cielo de Chicago de 1913 con el actual y darte cuenta de que, aunque la situación de las estrellas no ha cambiado, tan sólo vemos un pequeño porcentaje por la gran contaminación lumínica. Seguro que una vez que salgas por sus puertas verás el cielo con otros ojos. Más información en www.adlerplanetarium.org.
Museo de los niños
Garantizado que los niños pasarán una tarde muy divertida y además aprenderán un montón de cosas.
Perfecto para los niños.
Si viajas en familia, los más pequeños de la casa disfrutarán en este museo situado en Navy Pier. ¡Y es que no hay mejor manera de aprender que jugando! Con más de 15 exhibiciones interactivas repartidas en tres plantas, participarán en actividades educativas además de lúdicas como esconderse en la casa de un árbol, ese lugar secreto que de niños todos hemos deseado. Siempre acompañados por monitores, los niños se convertirán en pequeños arqueólogos desenterrando huesos, en arquitectos diseñando rascacielos y puentes o en artistas creando obras que se podrán llevar en la maleta de recuerdo. En la zona dedicada al agua, descubrirán la importancia de este bien tan escaso, pero no te preocupes porque estarán cubiertos por impermeables y luego tendrán secadores para que no se vayan del museo mojados. El precio de la entrada cuesta 14 dólares y está abierto todos los días desde las 10 de la mañana. Más información sobre las actividades en www.chicagochildrensmuseum.org.
The Field Museum
Si te gustan los animales y el origen de la vida, este es tu museo.
Recorrido por la vida animal de la tierra.
Tomó su nombre en honor a su primer benefactor, Marshall Field, y desde 1921 se sitúa en pleno centro, en el 1400 de Lake Shore Drive, con una gran colección antropológica, botánica, geológica y ecológica. Este magnífico edificio, similar a los templos romanos y griegos, te trasladará al antiguo Egipto, al Tíbet o al Pacífico, además de presentarte exposiciones sobre el planeta Tierra y su vida animal. Podrás ver gran cantidad de animales disecados y esqueletos aunque una de sus mayores atracciones es ‘Sue’, el tyrannosaurus rex mejor conservado del mundo. Sus 42 metros de largo, 13 metros de alto y 58 afilados dientes te permitirán hacerte una idea de la magnitud de estos animales prehistóricos. Además de su importante colección de fósiles y meteoritos, el museo alberga el quinto herbolario más grande del hemisferio occidental, con alrededor de 2,7 millones de plantas. El acceso cuesta 15 dólares, aunque el precio varía según las exposiciones o actividades que quieras realizar o, si lo prefieres, también puedes organizar una visita guiada. Encontrarás los precios en www.fieldmuseum.org.
Una visita sobre ruedas
Una forma muy divertida de recorrer la ciudad es en bicicleta con alguno de los tours organizados.
Hora de hacer algo de deporte.
Chicago es una ciudad para perderse caminando, recorriendo sus calles y disfrutando de las vistas desde sus rincones pero, si no quieres cansarte demasiado, te invitamos a explorar la ciudad sobre ruedas. Puedes aprovechar para hacer ejercicio alquilando una bicicleta por tu cuenta o con un guía. En Bobby’s Bike Hike, (www.bobbysbikehike.com) hay visitas guiadas desde 35 dólares y alquileres desde 23 dólares, una opción muy económica para disfrutar de los barrios más alejados, además de poder elegir un tour en bicicleta por 39 dólares en Bike and Roll Chicago (www.bikechicago.com/chicago-tours). Otra opción divertida es recorrer las calles en Segway ya sea con Segway Experience of Chicago (www.mysegwayexperience.com) o con Chicago Absolutely Tours (www.chicagosegways.com) por unos 59 dólares. Los más cómodos podrán subir a los autobuses turísticos de Chicago Trolley Company & Double Decker (www.coachusa.com/chicagotrolley) por 40 dólares, donde podrán elegir incluso un tour nocturno, además de bajar y subir cuando quieran. En Chicago Private Tours (www.chicagoprivatetours.com) pasearás a bordo de un vehículo privado con explicaciones en varios idiomas, incluido el español.
Lincoln Park
Además del zoo, podrás hacer un montón de actividades y observar cómo pasa la vida en Chicago.
Un día al aire libre.
Te invitamos a pasear por los alrededores del Lincoln Zoo y descubrir esta maravillosa zona verde. ¿Hay algo más americano que llevarte una cesta y una manta y hacer un picnic en el parque más grande de Chicago? Debido a la gran cantidad de estadios deportivos que tiene, no es extraño ver, en cuanto empieza el buen tiempo, a muchos locales jugando al béisbol, baloncesto, fútbol, tenis, voleibol e, incluso, golf. Con una situación privilegiada, en la orilla del Lago Michigan, en este parque, que curiosamente años atrás era un pequeño cementerio público, podrás hacer mil planes: tomar el sol o darte un baño en sus playas públicas, deambular por sus jardines, descubrir las aves y la flora silvestre mientras admiras el Lincoln Park Conservatory, ver alguna obra de teatro al aire libre o disfrutar de las estatuas del presidente Abraham Lincoln o del dramaturgo alemán Johann Friedrich von Goethe.
Jay Pritzker Pavilion
Siéntate y relájate mientras asistes a un concierto en un entorno natural.
Música al aire libre.
Caminando tranquilo por el novedoso Millennium Park encontrarás un espléndido y llamativo pabellón de conciertos al aire libre diseñado por el maestro de la arquitectura Frank Gehry. Sus curvas ondulantes de acero inoxidable y su enrejado de acero, que cubre la zona dedicada al público, sobresalen detrás del Cloud Gate y frente a los rascacielos de la ciudad. Esta original edificación, que comenzó a construirse en 1999 y se finalizó en 2004, incluye un área de 95.000 metros cuadrados de césped, 4.000 asientos fijos y alrededor de 7.000 más sobre el verde Great Lawn. Aquí se celebra en junio el Festival Grant Park Music, pero también otros conciertos y eventos gratuitos con los que podrás gozar de su perfecto y novedoso sistema de sonido, diseñado para imitar la acústica de una sala de conciertos cubierta.
Observatorio John Hancock
No lo dudes, el paisaje que vas a ver compensa el vértigo que vas a pasar.
¿Quieres disfrutar de las mejores vistas de la ciudad?
No apto para personas con vértigo, nada más salir a su Sky Walk al aire libre sabrás por que Chicago es conocida como ‘la ciudad del viento’. Al atardecer, desde el piso 94 verás la espectacular puesta de sol mientras la ciudad se ilumina, una imagen que probablemente nunca olvidarás. Además, es una buena manera de tomar contacto con Chicago ya que dispone de pantallas interactivas en siete lenguas con las que podrás ubicar desde las alturas de la torre, que se encuentra entre las 40 más altos del mundo, cualquier monumento o lugar que te interese. La entrada más económica cuesta 18 dólares pero para informarte sobre otro tipo de visitas: http://jhochicago.com. Si quieres hacer un recorrido por diversos sitios de la ciudad, te recomendamos el City Pass con el que tendrás descuentos en el Shedd Aquarium, Skydeck, Field Museum, Museo de Ciencia u Observatorio John Hancock y Adler Planetarium o Art Institute. (Más información: http://es.citypass.com/chicago )
Lincoln Park Zoo
Te proponemos que pases un día en el zoo, os gustará tanto a ti como a tu familia.
¡Todos al zoo!
Aunque se erige majestuoso al norte, en el barrio de Streeterville, dentro del pulmón verde del mismo nombre, si te gustan los animales no puedes desperdiciar la oportunidad que este lugar te ofrece. Disfrutarás con los saltos de los divertidos gorilas y chimpancés y podrás admirar los perezosos hipopótamos y rinocerontes africanos o escuchar aullar a los lobos. Cada rincón del zoo te permitirá conocer la gran diversidad animal y, en muchas ocasiones, incluso a sus crías. Aquí podrás conocer de primera mano reptiles, mamíferos y animales provenientes de todo el mundo o, simplemente, relajarte visitando sus jardines, participar en las clases de botánica o incluso hacer yoga en sus instalaciones. Abierto todos los días del año y de acceso gratuito, podrás acercarte en el autobús número 151 o 156 o en las líneas marrón o morada del tren. Los más pequeños se divertirán subiendo a los animales en peligro de extinción representados en el carrusel de madera o en el mini tren Express. Si quieres más información: http://www.lpzoo.org
Wrigley Field
Si te gusta el béisbol, no dejes de visitar el estadio de los Chicago Cubs y ver su curioso exterior.
El deporte americano por excelencia.
Los amantes del béisbol encontrarán en este histórico estadio, construido en 1914, un lugar donde disfrutar y conocer el deporte americano por excelencia. Situado en Addison Street y con capacidad para más de 41.000 personas, acoge al equipo de los Chicago Cubs y se caracteriza por sus verdes paredes de enredaderas de hiedra. Aunque se ha llamado Weeghman y, directamente, Cubs, fue en 1936 cuando la familia Wrigley compró el equipo y el campo adquirió el nombre actual, en honor al dueño del equipo. Si eres seguidor de los cachorros de Chicago te recomendamos realizar el tour para conocer su historia a través de un paseo por los vestuarios, sala de prensa y zona de juego, por 25 dólares. No te preocupes si hay partido ese día porque, antes de que comience, podrás entrar en la zona de bateo y disfrutar del ambiente previo. Toda la información sobre las visitas guiadas en www.chicago.cubs.mlb.com/index.jsp?c_id=chc.
Millennium Park
Sin salir de Gran Park, dirígete hacia esta zona para ver una serie de monumentos imprescindibles en tu visita.
Arte en todas sus esquinas.
Situado dentro del Grant Park, entre Michigan Avenue y Columbus Drive, estos terrenos propiedad del ferrocarril de Illinois y cubiertos por vías y estacionamientos durante el siglo XX, se transformaron en 2004 en uno de los lugares más frecuentados de la ciudad, donde disfrutar de esculturas y monumentos al aire libre. Galardonado en 2009 con el Premio a la Excelencia Urbana Rudy Bruner, el Millennium Park fue concebido para reconvertir el área industrial en un nuevo espacio público donde vecinos y turistas disfrutaran de grandes obras de arte y arquitectura como Crown Fountain, del español Jaume Plensa, el jardín Lurie o Cloud Gate de Anish Kapoor. Aunque en un principio se pensó en transformarlo en una tradicional zona verde que albergara una sala de conciertos, finalmente y gracias a la inversión privada, acabó convirtiéndose en un ambicioso y precioso proyecto con una colección de artistas, paisajistas y diseñadores de renombre internacional como Frank Gehry, quien firma el pabellón Jay Pritzker.
Grant Park
No es solo un parque para pasear, podrás escuchar música, visitar un museo, un acuario…
Un lugar con mucho ajetreo.
Este grandísimo espacio verde de más de 300 hectáreas se considera el jardín y pulmón principal de la ciudad. Probablemente su nombre te suene ya que es donde Barack Obama dio su discurso tras ganar las elecciones de 2008. Bajo sus hermosos árboles se encuentra el Instituto de Arte de Chicago, el Museo Field, el Acuario Shedd y la famosísima fuente de Buckingham. Un buen lugar donde dar largos paseos, sentarse a descansar o disfrutar de los festivales de verano. Como no podía ser de otra manera, en la ciudad de la música jazz por excelencia, en junio encontraremos el Chicago Blues Festival, donde disfrutarás durante tres días de los mayores conciertos de blues del mundo. Si te acercas hasta allí en julio podrás participar en el Taste of Chicago, el festival de comida al aire libre más importante del país.
Navy Pier
¿Quieres emociones fuertes? Acércate con tu familia a este parque de atracciones y pasa un día diferente.
Plan para toda la familia.
Para pasar un divertido día en familia te recomendamos visitar este histórico parque de atracciones situado sobre el lago Michigan. Entre niños y adultos, encontrarás todo lo necesario para pasar una jornada inolvidable: atracciones, tiendas, restaurantes y muchas actividades al aire libre. Llegar hasta aquí es fácil ya que está presidido por la gigantesca noria de 45 metros desde la cual tendrás unas especatulares vistas aéreas de la ciudad. Durante todo el año podrás perderte por un laberinto de espejos, ver una película en el Teatro IMAX con la pantalla de cine más grande de Chicago, viajar a la luna o la Antártida a bordo del FX Transporter o visitar el Museo de los Niños. Al explorar sus rincones verás conciertos, ferias de arte o el Chicago Toy & Fair Game para los más pequeños. Los miércoles y sábados de verano disfrutarás de los fuegos artificiales nocturnos y, durante el invierno, te divertirás en sus pistas de patinaje sobre hielo. Como curiosidad, desde uno de sus extremos obtendrás unas maravillosas vistas del Chicago Harbor Light (Faro de Chicago), que no se puede visitar. Para comprar entradas u obtener más información sobre los horarios: http://www.navypier.com
Willis Tower
Subir a Willis Tower y observar el skyline de la ciudad es una experiencia única en Chicago.
Un viaje a las alturas.
Una de las vistas más emocionantes de la ciudad y probablemente del mundo se admira desde el Skydeck de la Willis Tower, el rascacielos que sobresale en el skyline situado en el 233 de South Wacker Drive. No apto para cardíacos, te recomendamos sacar una impresionante fotografía desde uno de sus cuatro balcones de cristal flotantes de la planta 103. Desde aquí, si la meteorología lo permite, se puede ver en el horizonte cuatro estados diferentes en 80 kilómetros a la redonda. Por 18 dólares podrás subir a este edificio de récord ya que es el más alto de Estados Unidos y uno de los diez primeros del mundo. Terminado en 1973 con un coste de 175 millones de dólares, cuenta con 110 pisos de altura en unos increíbles 4,5 millones de metros cuadrados. Cuidado con tus oídos al subir en sus ascensores ya que están entre los más rápidos del mundo, con alrededor de 480 metros de subida al minuto. Más información sobre tickets y horarios en http://www.theskydeck.com/.
Casa-estudio de Frank Lloyd Wright
Descubre la casa del arquitecto y siente la inspiración de su ambiente.
Un estilo propio.
¿Te gusta la arquitectura? En esta ciudad disfrutarás como un niño, en especial entre estas paredes que fueron la residencia privada además del estudio de trabajo del arquitecto durante sus primeros 20 años de carrera. En este espacio del número 951 de Chicago Avenue, en Oak Park, Wright experimentó con sus nuevos conceptos de arquitectura, crió a sus hijos con su primera esposa y se inspiró para realizar sus obras de arte compactas y austeras. No te pierdas la oportunidad de realizar una visita guiada de entre 40 y 60 minutos en esta casa/estudio para admirar la belleza de su interior por 15 dólares. Además también podrás elegir un tour con un guía especializado, ya sea a pie o en bicicleta, por el barrio de Oak Park, donde se encuentra la mayor colección del mundo de edificios diseñados por el arquitecto estadounidense como las viviendas unifamiliares al estilo Prairie. Para conocer los horarios y los precios: http://gowright.org
Marina City
No destacan por tamaño, aunque sí lo hicieron en el pasado, sino por su curiosa forma y situación.
Dos peculiares torres.
Aunque no sean torres altas, llaman la atención tanto por su perfecta ubicación, a la orilla del río en North State Street, como por su curiosa forma redondeada, convirtiéndose así en una joya de la arquitectura. Ideadas por Bertrand Goldberg, abrieron sus puertas en 1962 consiguiendo ser, en aquella época, los edificios más altos del mundo. Curiosamente, además de sus 40 pisos de altura tienen 20 pisos de aparcamientos y un muelle para aparcar los barcos. Pese a que inicialmente fuera un encargo para diseñar la nueva sede de Chicago Janitor’s Union, el arquitecto logró convencer al presidente de la empresa para construir también viviendas para los trabajadores. En un principio se quiso que fuera ‘una ciudad dentro de la ciudad’ incluyendo servicios de ocio como una pista de patinaje para el disfrute de sus vecinos, pero finalmente se vio que no era económicamente factible y sus negocios se abrieron al público con un hotel, restaurantes y zonas recreativas.
Fourth Presbyterian Church
Pequeña iglesia símbolo de la paz entre el ajetreo de la ciudad.
Convivencia de religiones en la ciudad.
Chicago, ciudad de inmigrantes, ha acogido a lo largo de su historia muchas religiones diferentes. Claro ejemplo de ello es la gran cantidad de templos que encontrarás por sus calles. En plena The Magnificient Mile, zona de compras por excelencia rodeada de rascacielos, llama la atención este oasis religioso al que acuden cada domingo alrededor de 2.000 personas desde 1914. Fouth Presbyterian Church, obra del arquitecto Ralph Adams Cram, autor neogótico que también realizó la Catedral de St. John the Divine de Nueva York, combina a la perfección el estilo gótico inglés y francés. Tras el gran incendio de Chicago en 1871 el templo original se destruyó y años después se reconstruyó en East Chestnut Street, esquina con Michigan Avenue, donde se colocó la primera piedra en septiembre de 1912. A excepción de la Water Tower (Torre del Agua) y Pumping Station, que sobrevivieron al terrible fuego, éste es el edificio más antiguo de la zona. Más información en www.fourthchurch.org
The Flamingo
No eres consciente de la grandiosidad de esta escultura hasta que te paras a observarla, así que acércate y ¡deslúmbrate!
Un toque de color.
Sin ninguna duda, el toque de color a la ciudad lo aporta esta obra situada frente al Federal Kluczynski Building, en South Dearborn Street, firmada por uno de los escultores norteamericanos más destacados del siglo XX, Alexander Calder. Tanto su color rojo intenso como sus elegantes curvas forman un perfecto contraste con los grises del cemento y las formas rectas de los edificios de vidrio que la rodean. The Flamingo, que representa el reino animal, es gigantesca. Para hacerte una idea real de sus 16 metros de altura te recomendamos que pases por su apertura inferior. Pese a que en la firma el artista la fechó en 1973, no fue colocada hasta 1974 cuando se consiguió una exitosa integración urbana dentro de la plaza.
Water Tower y Pumping Station
Que hayan sobrevivido al incendo de Chicago, ya es motivo suficiente para ir a visitar estos monumentos a la resistencia.
Símbolo de fortaleza en la ciudad.
Dicen que donde hubo fuego, cenizas quedan. En Chicago ya no quedan rescoldos de aquel trágico incendio que arrasó gran parte de la ciudad la noche del 8 de octubre de 1871, pero sí quedan dos edificaciones que recuerdan esta época. Water Tower fue construida en 1869 con piedra caliza, lo que la salvó de la quema y la ha convertido en todo un símbolo de la resistencia de la ciudad. En su día, con 47 metros de altura sobresalía sobre los edificios, pero ahora hay que fijarse bien porque se pierde entre los rascacielos. Con pequeñas torres neogóticas alrededor, se asemeja más a un castillo medieval que a una torre de agua en sí misma, y ya se ha salvado de ser demolida en varias ocasiones por las protestas ciudadanas. Muy cerca está Pumping Station construida como una estación de bombeo de agua en 1866 y diseñada también por William W. Boyington.
Miró’s Chicago
Miró también tiene su espacio en Chicago a través de esta escultura entre rascacielos.
Arte en las calles.
Explorando el corazón de la ciudad, a muy pocos metros del Daley Center, en un pequeño callejón entre las alturas del Temple Building y el Cook County Administration Building, se encuentra una desconocida escultura de acero, bronce y cerámica del catalán Joan Miró. Durante su historia la ciudad se ha centrado en exponer una gran variedad de arte urbano al aire libre para que tanto el visitante como el local pudieran disfrutar de su paseo sin saber qué encontrarían en cada esquina, siendo ésta una de esas sorpresas. Aunque se le conoce popularmente como Miró’s Chicago, en un principio se llamaba The Sun, The Moon and One Star ya que representa el sol en su parte inferior, la luna con su esfera central, además de la estrella con el tridente superior cuyos dientes se asemejan a los rayos de luz.
The Picasso
Una escultura quel propio Picasso regaló a la ciudad y de la que todavía hoy se discute su significado.
Un Picasso en Chicago.
En la plaza del Daley Center, donde se encuentra el ayuntamiento, te llamará la atención esta escultura cubista de 50 metros de altura y 162 toneladas de peso realizada en hierro fundido. Ideada por Pablo Picasso, su inauguración en agosto de 1967 causó mucha controversia ya que los locales no entendían que en el centro político de la ciudad se instalara una estructura abstracta tridimensional que no cumplía con los cánones del arte de la época. La escultura que como no tiene nombre se le conoce popularmente como ‘Chicago Picasso’ o ‘The Picasso’ fue un regalo del artista malagueño a la ciudad. Picasso nunca llegó a explicar lo que representa por lo que han sido mucho las teorías sobre su significado. Sus diseños y bocetos previos, en los que trabajó durante más de un año, también los donó al Art Institute of Chicago para su exposición.
Crown Fountain
Se trata de una escultura muy peculiar en Chicago que no te puedes perder.
La fuente de las mil caras.
Mientras paseas por Millennium Park te encontrarás con una torre de ladrillo de vidrio de 15 metros de altura. Te sorprenderá descubrir que es una fuente firmada por el artista catalán Jaume Plensa en cuyas pantallas de LED se van mostrando las caras de 1.000 vecinos de Chicago con la boca abierta coincidiendo con los chorros de agua. De esta manera parece que sean ellos los que están echando agua por la boca como las tradicionales gárgolas. Junto a esta video escultura inaugurada en 2004 con un coste de 17 millones de dólares, encontrarás una piscina de granito negro de poca profundidad donde niños y mayores pueden acercarse a refrescarse. Aunque podrás ver las imágenes durante todo el año, la fuente solo funciona de mayo a octubre, evitando así los meses de más frío.
Clarence F. Buckingham Memorial Fountain
¿Sabías que aquí comienza la Ruta 66? Disfruta del espectáculo antes de comenzarla.
Agua, luces y colores.
Además de sus grandes edificios del skyline y sus zonas verdes, tienes que acercarte hasta la fuente considerada más grande del mundo. Construida en mármol rosa e inaugurada en 1927, es el punto de partida de la famosísima Ruta 66 y se encuentra en Columbus Drive, dentro del Grant Park. Aunque su funcionamiento depende de las condiciones meteorológicas, cada hora, desde las 8 de la mañana hasta las 22:35, que es la última exhibición, se puede contemplar su inolvidable coreografía de agua durante 20 minutos. Por la noche, la fuente se ilumina con 820 luces que producen una mezcla de colores que la propia autora, Kate Buckingham, definió como ‘luz de la luna suave’. Además cuenta con un sistema de control que supervisa las válvulas y las bombas de la fuente para coordinarlas con las luces y la música.
Cloud Gate
Prepara tu cámara para el Cloud Gate, conocida popularmente como The Bean, y dispara tantas veces como puedas ¡fotos irrepetibles!
La foto de Chicago.
Si eres amante de las fotos originales no dejes de tomarte una instantánea en el reflejo de alguno de los lados de esta escultura realizada por Anish Kapoor. Situada en el Millennium Park, es imposible posar frente a Cloud Gate sin gente alrededor, pero merece la pena el contraste con el horizonte de la ciudad y el cielo azul. De acero inoxidable y con 110 toneladas de peso, comunmente denominada The Bean por su aspecto de judía, está inspirada en el mercurio y realizada con placas pulidas a modo de espejo. Cloud Gate fue colocada en AT&T Plaza para la inauguración del Millennium Park en 2004, aunque no se finalizó hasta mayo de 2006 ya que acabó siendo de mayores dimensiones de lo esperado. El coste inicial se estimó en seis millones de dólares aunque finalmente alcanzó los 23 millones, financiados únicamente con donaciones de particulares y empresas. Con unas medidas inmensas, posee un arco inferior donde no es extraño encontrar gente tumbada tomando fotos distorsionadas.
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